A los 60 años y producto de un cáncer, murió ayer el ex decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Católica, Francisco Rosende Ramírez.
El economista, que cursó Ingeniería Comercial en la Universidad de Chile y un máster en Economía en la Universidad de Chicago, es catalogado como uno de los profesores más influyentes de las últimas décadas.
Francisco Rosende tenía dos pasiones además de la Macroeconomía: el fútbol y el tango. Hincha de Colo Colo. Bueno para relatar historias del oeste americano con imaginación admirable. Cercano y cálido. Esos son algunos rasgos que recuerdan sus cercanos.
Su interés por la economía comenzó cuando cursaba tercero medio en el Liceo 11 de Las Condes. Desde esa época se fue interesando por temas vinculados a la pobreza, el progreso y la inflación, el crecimiento entre otros, influido además por el pensamiento de su padre quien trabajó varios años en la Corporación de Fomento (Corfo). Su madre estudiaba ingeniera comercial en la Universidad Católica cuando él decidió ingresar a estudiar la misma carrera en la Universidad de Chile, donde fue alumno de Roberto Zahler, Sebastián Edwards y Álvaro Saieh, entre otros. Posteriormente, en 1981, viajó a Estados Unidos para cursar un Master of Arts en Economía en la Universidad de Chicago. Ahí fue alumno de Arnold Harberger, conocido como el padre de los Chicago Boys.
Su pensamiento estuvo influido por esta corriente y luego leyendo a Milton Friedman, advirtió que la economía podía y debía aportar con soluciones concretas a los problemas que afectaban a la sociedad como la pobreza y las escasas oportunidades en comparación con las grandes expectativas de progreso de la gente; desigualdad e injusticia social.
Dos años más tarde, regresó a Chile, y su primera gran escuela fue el Banco Central, lugar donde estuvo entre 1985 y 1990. Primero fue jefe del Departamento de Estudios y luego fue nombrado gerente de Estudios. En esa institución aterrizó en plena crisis bancaria y por ello, con datos duros en mano pudo analizar las formas de superar ese complejo escenario por el cual atravesaba el país. "Con datos construimos una visión más rigurosa y menos ideológica de los problemas", señaló hace un tiempo a Visión UC. Rosende además fue muy relevante en la creación de la nueva institucionalidad autónoma que adoptó el Banco Central.
Posteriormente se integró a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Católica. En esa casa de estudios fue decano por 18 años, entre 1995 y 2013. Durante este periodo, la facultad aumentó su planta de 25 a 64 profesores, potenciando con ello la labor docente sin dejar de lado el desarrollo de la investigación en las distintas disciplinas. La creación y consolidación de múltiples programas de posgrado, incluyendo el MBA y el doctorado en Economía, así como su permanente compromiso con la docencia, son parte de su legado principal, señaló su sucesor, el decano José Miguel Sánchez a la revista Visión UC de la misma casa de estudios. También se desempeñó en cargos de consejero en la Comisión Resolutiva Antimonopolio, en la Comisión de Defensa de la Libre Competencia, como investigador en el Centro de Estudios Públicos, y como integrante del consejo directivo de Clapes UC.
El alto historial de este experto en crisis financieras fue reconocido en 2013 con el Premio de Excelencia Docente, mientras que en 2014 fue elegido por sus pares como el mejor economista del año. En junio pasado se le reconoció con la entrega del máximo honor académico que entrega la Universidad Católica: el premio Monseñor Carlos Casanueva que distingue la trayectoria universitaria. Su última aparición pública fue la presentación de la segunda edición de su libro "La Escuela de Chicago", el 2 de agosto en la Casa Central de la UC.
A Rosende le sobreviven su esposa Karin Jürgensen y sus cinco hijos: Catalina, Magdalena, Constanza, Francisco y María Gracia.
Sus funerales se realizarán hoy a las 12:00 horas en la parroquia San Francisco de Sales, en Vitacura.
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