El trágico accidente de la Torre de Pemex, cobró la vida de 37 trabajadores administrativos.
Ciudad de México.- La fatal mezcla de solventes, gas metano y el registro de una chispa eléctrica, fueron la causa de la explosión en el Edificio B-2 del complejo corporativo de Pemex, al menos así lo acotó la Procuraduría General de la República (PGR) a seis meses del incidente.
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"Un orden de eventos se sumaron una serie de particularidades que dieron origen a la explosión del área suroriente del sótano del inmueble, en primer lugar la presencia del metano de origen biológico acumulado a lo largo del tiempo, según lo informa el Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México y los vapores provenientes de los materiales solventes que en un espacio confinado se generó un elemento de ignición, causando el estallido (según peritajes de la PGR)", señaló la Procuraduría sobre la investigación que coordinó sobre el incidente.
"Un orden de eventos se sumaron una serie de particularidades que dieron origen a la explosión del área suroriente del sótano del inmueble, en primer lugar la presencia del metano de origen biológico acumulado a lo largo del tiempo, según lo informa el Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México y los vapores provenientes de los materiales solventes que en un espacio confinado se generó un elemento de ignición, causando el estallido (según peritajes de la PGR)", señaló la Procuraduría sobre la investigación que coordinó sobre el incidente.
"También se especifica que la explosión fue de tipo difuso, que se inició con una chispa de origen eléctrico o mecánico generando un flamazo de forma instantánea que consume en su totalidad la mezcla explosiva (de vapores y gas metano) presente en la zona de pilotes aumentando la temperatura y presión", se agrega.
Tras el flamazo, la PGR argumenta que se presentaron las quemaduras en los tres empleados que se encontraban en la zona de pilotes, para después fracturar, romper y proyectar la loza de cimentación.
"Petróleos Mexicanos ha tomado las medidas necesarias instalando sistemas de ventilación en el inmueble, a fin de evitar la acumulación del gas", indicó la Procuraduría.
Entre peritos extranjeros y el Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México, se llegó a la conclusión (de la que la opinión pública dudó) de que tras el análisis geológico del subsuelo, se comprobó la existencia de diversas capas de sedimento impregnado de hidrocarburos.
"Ya sea por derrames de los depósitos de combustible de la Huasteca Petroleum Company, que hasta los años treinta estuvo situado en dicho predio, o del depósito de almacenamiento de hidrocarburos del servicio público del Distrito Federal, inmueble que también se localizó en esa ubicación", justificaron en esa ocasión, luego de la lamentable pérdida de 37 trabajadores de la paraestatal.
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