Dar un respiro a las empresas en las obligaciones financieras de corto plazo fue la premisa que adoptó la industria bancaria para diseñar los planes de contingencia con los que están actuando con estos clientes tras el terremoto del pasado 27 de febrero.
El reporte inicial de instalaciones productivas dañadas u oficinas destruidas o con averías que tardarán varios días en volver a la normalidad, fue el causante de que la mayoría de los bancos comenzara a ofrecer períodos de gracia y productos en condiciones especiales de plazo para las empresas que con estos daños ven perjudicadas su liquidez y capacidad de pago.
"En nuestro caso no se exigieron pagos de intereses ni capital para los vencimientos dentro de los 15 primeros días ofertando y otorgando a nuestros clientes prorrogar créditos, por un plazo de 90 días mientras se evalúa su situación particular", ejemplifica Mario Gómez, gerente banca comercial de Bci.
Para las empresas de menor tamaño también existen soluciones especiales para "alivianar" sus obligaciones comerciales. Según un catastro del BCI existirían al menos 1.400 compañías con esta necesidad de apoyo financiero en las zonas más afectadas.
En ese sentido, José Luis Mardones, presidente de BancoEstado, entidad que tiene entre sus principales clientes las micro y pequeñas empresas, gran parte de las cuales trabaja en regiones, explica que para este sector el principal alivio fue autorizar un periodo de gracia de dos cuotas de la deuda que este tipo de cliente mantenga con el banco.
"Este beneficio fue otorgado de manera automática para los clientes de las regiones más afectadas (VII y VIII Región) y como una posibilidad a las empresas de zonas menos afectadas", explica Mardones.
Más soluciones
Condiciones especiales para operaciones de factoring y leasing son otras de las iniciativas que adoptó la banca para ir en ayuda de las empresas más dañadas con la catástrofe.
Un ejemplo de esto es lo que ofrece el Banco Itaú con el levantamiento de los vencimientos de las operaciones de factoring, "que es donde posiblemente se presentarán casos de demora en los pagos por el impacto en la cadena de crédito", explica Rodrigo Guerrero, su gerente de división Empresas.
En el caso del leasing, explica Guerrero, la oferta consiste en readecuar los contratos para aquellas empresas "que claramente puedan ver alterados sus flujos de los próximos meses, llevando algunas cuotas hasta el final del contrato".
Si bien ya se ven ofertas de créditos con plazos más extensos para el pago, José Luis Mardones explica que en las próximas semanas esto se verá con mayor claridad y alternativas ya que se pasaría a otra fase, que sería la de apoyo para levantar las empresas caídas y que puedan hacer los planes de inversión. Esto, destaca, en conjunto con las iniciativas legislativas del Estado.
"El gobierno entrante ya ha anunciado que mandará un conjunto de leyes, en la que incluye una de reconstrucción, que sin duda tendrán un tipo de alivio para las empresas y que harán que la banca tenga que analizarla para diseñar con más detalle nuevas herramientas y medidas de apoyo", explica Mardones.
En ese sentido, la industria destaca que la reacción y el plan de contigencia ha sido acorde a las necesidades que van presentando las empreas de todo tamaño.
"Hoy estamos preparados para lo más urgente, sin embargo, también lo estamos para lo importante que son las necesidades de mediano y largo plazo", concluye Rodrigo Guerrero.
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