Las exportaciones de productos industriales anotaron una caída de 24,3% durante febrero, la mayor baja desde abril de 1999, en plena crisis asiática, anticipando además una contracción brusca en la producción del sector.
De acuerdo a los datos entregados ayer por el Banco Central, los envíos manufactureros durante el segundo mes del año totalizaron US$ 1.145,3 millones, US$ 368 millones menos que en febrero del año pasado.
La menor demanda externa, debido a la crisis económica global, es la gran responsable de la fuerte baja de la industria, la que afectó a prácticamente todos los grupos de productos manufacturados.
Liderando las caídas están los productos de madera, con una baja de 41,3%, impactados por la mala situación de la construcción en Estados Unidos.
Le siguen la baja en los productos químicos (-39,9%), particularmente por el freno en la producción de metanol.
Otro grupo que cayó fuerte es el de la celulosa y el papel, con una baja de 20,9%.
El único sector que mostró una leve alza es el de alimentos, que creció 1,3% durante el mes, donde destacan los envíos de salmón, que crecieron 20,9%. Según los expertos, la explicación de esta alza estaría en la mayor demanda por este producto, ante las expectativas que aumenten sus precios en el corto plazo, por los problemas particulares que enfrenta esa industria.
Mal augurio
Estas cifras anticipan que nuevamente la industria tuvo un mes para el olvido en febrero.
El economista de Celfin Capital, Cristián Gardeweg, sostiene que las malas cifras de envíos en la industria “reflejan la fuerte contracción a nivel global de ese sector”.
De hecho, en Estados Unidos la producción manufacturera cayó 11,2% durante febrero. Disminuciones mayores se ven en Europa y en Asia, donde en algunas economías, como Taiwán, las bajas sobrepasan el 40%.
Con todo, Gardeweg proyecta que la producción industrial durante el mes pasado cayó a una cifra similar a la de enero, de 8,9%.
En tanto, el economista jefe de Santander GBM, Pablo Correa, anticipa una baja de 9,3% para las manufacturas, lo que fue refrendado por las cifras conocidas ayer.
“En general, la industria es un sector dedicado a exportaciones, por lo que seguiremos viendo cifras negativas durante todo el primer semestre”, indica Correa y agrega que recién a partir de septiembre podrían comenzar a registrarse alzas.
Otro sector con problemas es la minería. Las exportaciones de cobre llegaron a
US$ 1.276,9 millones, lo que equivale a una caída de 58,3%, sólo una décima menor a la baja de enero. Ambas cifras son las más negativas desde que existen cifras comparables, en 1997.
De esta forma, las cifras conocidas ayer son el primer aviso concreto del magro desempeño de la actividad durante el mes.
Menor demanda
Las importaciones de bienes de consumo durable también tuvieron un mal mes, al totalizar compras por
US$ 150,7 millones, lo que equivale a una baja de 50,4%, la mayor desde febrero de 1999.
Esto da cuenta de la débil demanda interna, que afecta principalmente a este tipo de productos, que incluye automóviles y aparatos electrónicos.
La baja de febrero es la quinta consecutiva y, de acuerdo a expertos del mercado, éstas debieran continuar durante los próximos meses, principalmente por el aumento del desempleo y por las malas expectativas sobre la evolución de la economía, lo que frena las compras.
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