Mientras algunas empresas ya se aprestan a crecer de la mano de la internacionalización, otras temen ser excluidas en el nuevo escenario.
Después del desfile mediático de los pánzer accionarios y ejecutivos de Falabella y D&S explicando los alcances de su sonada megafusión empezaron los análisis sobre las repercusiones de este matrimonio.
Las miradas apuntan a los proveedores, de quienes se podría suponer cierto grado de recelo a una mayor concentración del mercado. Sin embargo, a poco más de una semana de anunciarse la fusión, no hay una señal de alerta clara entre los abastecedores, y algunos comienzan a evaluar las oportunidades de negocios que se les abren con el nuevo conglomerado.
Según varios proveedores, que D&S sume el 4% ó 5% de participación de mercado -el aporte de Falabella con Tottus y San Francisco- no hace gran diferencia respecto del poder que ya tiene la firma de los Ibáñez, con el tercio del mercado que le dan sus más de 100 locales. Por otro lado, entre los grandes proveedores -agrupados en la Asociación Gremial de Industrias Proveedoras (AGIP)- hay conciencia de los altos grados de concentración que ellas mismas ostentan como abastecedoras en ciertos rubros de productos.
A pesar de los anteriores conflictos entre ambas partes, en D&S, dicen proveedores, se nota un cambio de estilo, apuntalado por la puesta en marcha del acuerdo marco con sus abastecedores, a raíz del avenimiento firmado a instancias de la Fiscalía Nacional Económica. No obstante, "estaremos atentos al actuar de este nuevo operador", dice el presidente de la Cámara Cosmética, Denis Kennedy.
Marcas de precio
La gran duda está entre los proveedores de marcas de precio de los supermercados (distintas a las marcas propias), ya que en este segmento de negocios existe la práctica de que los abastecedores tienen contratos sólo con algunas cadenas de supermercados. Por ende, las compras o fusiones pueden implicar el término del acuerdo. "Tengo mis marcas en San Francisco y Tottus y si D&S queda al mando del nuevo modelo, a mí me pueden echar, como ya me pasó con Montecarlo y Economax", dice un importante abastecedor de segundas marcas, en alusión a la experiencia que ya tuvo con las compras que hizo Cencosud de esas cadenas en 2006.
Sin embargo, otros refutan el planteamiento: "Los ejecutivos de Falabella nos han comunicado que su intención es seguir trabajando con medianos y pequeños proveedores y que con esta alianza habrá espacio para todos", dice Héctor Freire, gerente general de Comercializadora Interandina, proveedora de carnes de San Francisco por más de 20 años y quien explica que el asunto fue explícitamente discutido con ellos tras la fusión.
La misma versión cuentan altas fuentes de D&S, quienes explican que al final es el consumidor el que manda y que con la compra de El Pilar han mantenido incluso a los abastecedores regionales.
Para otros, esta alianza representa importantes oportunidades comerciales. Myriam Lama, socia de Embotelladora Latinoamericana -principal proveedor de bebestibles de marcas propias de D&S (A Cuenta y Lider)-, afirma que la fusión les permitirá desarrollar nuevos productos, una senda que ya han iniciado. "Estamos introduciendo en el mercado productos como Ciro, un jugo hecho con agua mineral, y una cerveza que tenemos en carpeta proveer a D&S", dice.
"Nosotros tenemos capacidad instalada que nos permite atender a Latinoamérica. La fusión traerá oportunidades a la industria", dice el gerente general de laboratorio Intercos, Mauricio Hörmann. Esta empresa provee a D&S de las marcas Lider, BGood y Body + en los rubros de limpieza hogar e higiene personal. Hörmann aclara que las opciones de llegar a mercados externos a través de la empresa fusionada se acotarán a categorías específicas, como cremas o detergentes de alta concentración.
De hecho, varios consultados creen que no será masiva la opción de llegar a mercados externos a través de la firma fusionada, debido a los altos precios de los fletes, los aranceles de los otros países y la incapacidad de algunos productos de ser transportados. "Las posibilidades no se les abren a las grandes compañías, sino a las medianas o pequeñas -dice un importante proveedor-. Pero depende del producto, tienen que ser nichos puntuales que no tengan competencia en los otros países". Los gremios también descartan esta opción. "No es el caso de nuestros asociados, quienes manejan sus exportaciones en forma directa", dice Juan Miguel Ovalle, presidente de la Asociación de Productores Avícolas de Chile (Apa).
El impacto en la planilla
La pregunta de qué cabezas pueden rodar en este proceso genera urticaria en ambas empresas, donde aseguran que no ha habido nombres sobre la mesa.
Afirman que como no hay estructuras centrales, las duplicidades son pocas, y como la consigna es crecer, nadie sobra. Pero en el mercado suenan nombres que podrían salir de la planilla. Uno de ellos es Francisco Leyton, vicepresidente ejecutivo de supermercados Tottus y San Francisco, dado que esta área quedaría a cargo del actual gerente general de Lider, Enrique Ostalé. En Falabella lo descartan porque enfatizan que Leyton está en un cargo no ejecutivo y porque creen que tiene mucho que aportar en la internacionalización del rubro.
Otro caso que surge es el de Marcelo Fernandino, gerente general de San Francisco, pero por razones personales. En 2004 se interpuso una acción legal en su contra por eventual uso de información privilegiada cuando se fue de la gerencia de productos de gran consumo de D&S a Falabella.
Fuentes del holding afirman que los conflictos del pasado están fuera de los factores a considerar, y que Fernandino exhibe una buena gestión: San Francisco maneja en forma eficiente la relación gasto en personal versus venta.
Respecto del futuro de Elías Ayub, gerente de Presto; Claudio Cisternas, gerente de CMR Chile, y Michel Awad, gerente corporativo de retail financiero de Falabella, dicen que todo dependerá de la estrategia a seguir, pero ven poco probable que alguno se vaya.
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