2016/08/04

Hacienda propone nuevo esquema de supervisión consolidada para el sistema financiero

En el último paso legislativo, el ministro Valdés planteó agregar una nueva redacción al proyecto que crea la Comisión de Valores que abra la puerta a que los mismos consejeros supervigilen a los bancos y al sistema de pensiones en el futuro.Miriam Leiva P.MIRIAM LEIVA P.

El ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, sorprendió a los diputados de la Comisión ad hoc cuando analizaban el proyecto que crea una Comisión de Valores con una propuesta muy distinta de lo que se había discutido hasta la fecha. La autoridad, planteó generar un esquema de supervisión consolidada del sistema financiero sentando las bases en esta iniciativa. 
Lo sorprendente, además, es que como el proyecto está en su última fase de tramitación, fuera el propio Ejecutivo el que haya solicitado enviarlo a Comisión Mixta para poder agregarle una redacción que permita incorporar en un futuro próximo a las superintendencias de Bancos y Pensiones, bajo el alero de la Comisión de Mercado Financiero. 
En palabras simples, se propone que esta Comisión integrada por cuatro consejeros mantenga las atribuciones de sancionar, normar y proponer nuevas regulaciones, pero que se amplíe a todo el mercado de capitales. Así, los reguladores específicos -superintendentes de valores, bancos y pensiones- participarían indistintamente dependiendo del tenor de las materias que se analicen. Las superintendencias mantendrían el rol de fiscalización y conducción del servicio.“Esta idea nos permitiría tener comisionados con bastante más espaldas, puestos bastante mejor pagados, usar mejor los recursos que tenemos porque son personas que pueden tener más tiempo, y compartir información de manera más efectiva. Se da una supervisión consolidada de facto en algún sentido”, sostuvo Valdés. 
El ministro, explicó que por ahora, sólo se aplicará esta estructura para Valores y Seguros, pero se deja abierta la puerta para los bancos e instituciones financieras, considerando que se aproxima el ingreso del proyecto que reformará la Ley de Bancos. “Para poder tener la oportunidad de hacer esta discusión con tiempo y la madurez que se requiera cuando tratemos bancos, nos parece que sería bueno dejar la Comisión de Valores armada como proyecto, de manera que sea de fácil ensamblaje si se decidiera lo otro “, recalcó. En un futuro más largo podría incluirse a la Superintendencia de Pensiones.
Los diputados recibieron con sorpresa esta propuesta y le solicitaron una minuta y una semana de plazo para seguir conversando el tema aunque en un principio estuvieron de acuerdo.
“Hemos conversado con algunos actores, en general influyentes como integrantes de comisiones previas (comisión Desormeaux), ex superintendentes, y lo han visto con buenos ojos. Sólo les dio algo de miedo que demorara demasiado el despacho”, explicó Valdés. 
Reacciones de lado y lado Como el proyecto recién salió del Senado sin haber analizado esta nueva arista, el ministro se acercó el martes al presidente de la Comisión de Hacienda, el senador Andrés Zaldívar (DC), para explicarle la idea y la posibilidad de que el texto se fuera a Mixta. “Estoy en proceso de maduración de esta idea novedosa, que sin embargo tiene cierta lógica de contar con una superestructura que vigile todo el sistema financiero. Es mucho más coherente una supervigilancia que garantice una identidad para todo el sistema y evite duplicidades”, señaló el parlamentario.  Asimismo, el diputado Javier Macaya (UDI) manifestó que esperan los informes técnicos que llevaron a Hacienda a modificar una parte sustantiva de la regulación. El diputado Fuad Chahín (DC) alabó el planteamiento, “comparto no solo la idea de dejar abierta la puerta para incorporar en este esquema de gobierno corporativo a la superintendencia de bancos”.
DC quiere revisar inhabilidades
Los integrantes DC de la Comisión de Hacienda elaboraron una minuta con varios cambios que desean introducir al proyecto en la Mixta. Entre ellos, las inhabilidades post empleo de los comisionados y los jefes de primer y segundo nivel. El proyecto establece que en tres meses al término de su cargo, estas personas no podrán ejercer en una empresa dentro del sistema que regularon y recibirán el 75% de su sueldo anterior. Los próximos tres meses no podrán trabajar en una firma que hayan fiscalizado directamente. Los diputados DC consideran que este período de gracia aún es bajo para los estándares OCDE y plantearán aumentarlos a un año. 


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