2013/10/15

Jesús Gracia, Secretario de Estado de Cooperación y para Iberoamérica: “América Latina es más compleja de lo que se podría pensar en la época de Chávez”

Jesus Gracia
(Especial Infolatam, por Consuelo Álvarez de Toledo).-
Se ha dejado barba, pero la sonrisa le aflora abiertamente porque el panorama iberoamericano resulta claramente más favorable para España que cuando llegó a este despacho con tanto sabor latino. A punto de coger el avion para ir a la Cumbre de Panamá Jesús Gracia repasa con Infolatam la realidad iberoamericana . Una América Latina en la que las democracias se consolidan y las economías tienen buenas perspectivas.

En este contexto era necesario reformar las Cumbres Iberoamericanas. En lo organizativo, mas agilidad. Y en lo formal, con el relevo de Enrique Iglesias. ¿Quien será el sucesor?… La prudencia obliga a los matices: España no tiene candidato, pero buscamos alguien con experiencia internacional fuerte, con una visión del mundo actualizada, metido asuntos internacionales, con capacidad de trabajar en la integración y que reúna un consenso generalizado, que no provoque rechazos o adhesiones fuertes. Vamos a encontrar esa candidatura y vamos a poder dar continuidad e impulso a la SEGIB”.

Le digo que ese perfil coincide con el de Rebeca Grynspan…. “Creo que sí. Rebeca Grynspan tiene profundos conocimientos económicos, es economista y buena economista, ha trabajado en temas de desarrollo, con capacidad para hablar con otros organismos internacionales y no provoca rechazo en otros países…”

P.- De Cumbre a Cumbre, de Cádiz a Panamá ¿Qué es lo más importante que ha sucedido de América Latina?
Jesús Gracia.- En el ámbito de las Cumbres creo que ha sido la renovación y el trabajo encabezado por el presidente Lagos para su renovación: y en el ámbito de los países iberoamericanos ha habido citas importantes, la consolidación de Alianza Pacifico, procesos de cambio democrático que son ya una generalidad y, cómo no,algunos contratiempos que hay siempre en América Latina que nos han tocado, con algunos casos de empresas españolas.

P.- El año antes de la Cumbre de Cádiz fue de una actividad casi trepidante por parte de España ¿Diría que desde entonces se ha fortalecido la presencia de España, más en lo económico que en lo político?

J. G.- En este último año se ha consolidado nuestra presencia con intercambios entre España y América Latina, hay una continuidad de las empresas y una consolidación de las inversiones. Y algo más novedoso como es que cada vez mas empresas multilatinas vienen a y adoptan a España como lugar de expansión mundial. Y en lo político también; hemos asistido a las tomas de posesión de Peña Nieto, Maduro, Correa, Cartes. y hemos tenido un dialogo con todos los países. Fue muy importante la cumbre de Cali de la Alianza Pacífico.

P.- Esta Cumbre de Panamá es la de la transición personal y organizativa: ¿Cómo ve la sucesión de Enrique Iglesias? ¿Será definitivamente Rebeca Grynspan la nueva Secretaria General de Iberoamérica?

J. G.- Veo bien en general la sucesión de Enrique Iglesias y a Rebeca Grynspan también. España no tiene un candidato. Pero si estamos por alguien que continúe la labor de Enrique Iglesias que ha sido excepcional por su personalidad, por su currículo, por su entusiasmo. Porque ha hecho una labor impresionante en estos 8 años. Queremos un candidato importante, con experiencia internacional fuerte, con una visión del mundo actualizada, metido asuntos internacionales, con capacidad de trabajar en la integración y que reúna un consenso generalizado, que no provoque rechazos o adhesiones fuertes. Vamos a encontrar esa candidatura y vamos a poder dar continuidad e impulso a la SEGIB.
P.- Ese perfil coincide con el de Rebeca Grynspan….

J. G.- Creo que sí. Rebeca Grynspan tiene profundos conocimientos económicos, es economista y buena economista, ha trabajado en temas de desarrollo, con capacidad para hablar con otros organismos internacionales y no provoca rechazo en otros países…
P.- Y además es de Costa Rica…

J. G.- Tenga en cuenta que ahí esta Nicaragua…. En fin, lo que hemos acordado con México y con Brasil es que no fuera de grandes países. Así que está bien.

P.- ¿Habrá algún cambio en el Informe Lagos?
J. G.- Sólo pulir algunos detalles. Se trata del fortalecimiento de la SEGIB para que pueda dar servicio a las Cumbres, que serán cada dos años; dar mayor mayor agilidad, un año la Cumbre Iberoamericana y otro la de América Latina Unión Europea. Y sobre todo centrarnos en lo que somos más eficaces, en trabajar en lo que nos une: las lenguas, la cultura, la educación, en el mundo de internet y las nuevas tecnologías, que es con lo que podemos presentarnos ante el mundo como una gran comunidad. Su periódico, Infolatam, es un buen ejemplo de ello.

P.- ¿La financiación plantea algún problema por ser España la que contribuya con mayor aportación? ¿Seguirá la SEGIB en Madrid?
J. G.- España no plantea ningún problema con la financiación. Trataremos, eso sí, de que se empleen bien los recursos para que sea más eficiente. Y la SEGIB seguirá en Madrid.
P.- Una novedad será el Fondo Iberoamericano de Cooperación ¿cómo va a funcionar?

J. G.- El Fondo Iberoamericano de Cooperación, que es una idea de Enrique Iglesias, es que la financiación se haga no solamente con recursos públicos, sino también con recursos privados. Se trata de buscar elementos comunes – públicos y privados- en donde lo iberoamericano sea una ventaja para trabajar por ejemplo en plataformas de internet, promover lo nuestro en el mundo digital. Desarrollar actividades en ámbitos educativos, cursos on line, en los que lo público privado podemos tener interés común.
Rebeca Grynspan tiene profundos conocimientos económicos, es economista y buena economista, ha trabajado en temas de desarrollo, con capacidad para hablar con otros organismos internacionales y no provoca rechazo en otros países…
P.- En estos diez últimos años hubo una actividad febril de integración de manera que cada dos por tres los presidentes se reúnen, se sacan la foto y después no suceden grandes cosas ¿Qué pasará con las Cumbres Iberoamericanas?

J. G.- En estos diez años han nacido otros procesos como CELAC, Mercosur y otros que son subregionales y con intereses muy concretos, algunos con mayor ambición, pero tenues o débiles en su hilo argumental porque no han cuajado todavía. La Iberoamericana tiene la ventaja y la diferencia de que está en América y también en Europa. En este sentido el ministro García Margallo propondrá la creación de un Observatorio de procesos de integración mundiales como el de la Unión Europea con Estados Unidos y ver en lo que puedan afectar a la Cumbre.

P.- ¿Se nota mucho la ausencia de Hugo Chávez?
J. G. - Es que la realidad de América Latina es más compleja de lo que se podría pensar en la época de Chávez,que hacía ver las cosas de una manera determinada, por su empuje y su personalidad. Pero en realidad hay países y procesos muy diferentes en cuanto al comercio, la integración, las libertades públicas. En otros casos también hay afinidades, claro.

P.- ¿Le gusta especialmente a España la Alianza Pacífico?
J. G. - Alianza Pacífico es una organización donde se apuesta por la apertura de relaciones, donde es más fácil hacer negocios y en consecuencia las relaciones son más fluidas en cuanto al comercio o las inversiones.

¿Por qué esta fijación venezolana del presidente Maduro con España?
J. G:- Habría que preguntárselo a él. Por nuestra parte hemos hecho un gran esfuerzo diplomático, por deshacer prejuicios o malentendidos. Hay que tener paciencia para evitar caer en crisis que pueden ser de larga duración y solucionar los exabruptos caso por caso… Y no hacerle mucho caso. Venezuela está en un momento difícil y tratamos de conllevarnos.

P.- La otra espina con la que usted se encontró al llegar aquí era Argentina, recién estallado el caso Repsol. ¿Cómo van las relaciones con Cristina Fernández?
J. G.- Primero, le deseamos pronta y feliz recuperación. La cuestión, más que las relaciones con España, es qué política está llevando Argentina. Posiblemente haya cambios tras las elecciones; las encuestas no son muy buenas y de lo que se está hablando en estos momentos en Argentina es de qué va a pasar dentro de un modelo que no será tan ideológico o kirchnerista como ha sido hasta ahora.
El problema de la nacionalización de las acciones de Repsol en YPF no se ha solucionado y estamos en promover que se arregle entre la empresa y el gobierno argentino. Creo que es difícil que lleguen a un acuerdo a corto plazo. Ha habido oficiosamente encuentros y ofertas que Argentina desmiente, pero que las hay.
P.- ¿El problema de Repsol con YPF, está en vías de una pronta solución, tal como se ha dicho?
J. G.- El problema de la nacionalización de las acciones de Repsol en YPF no se ha solucionado y estamos en promover que se arregle entre la empresa y el gobierno argentino. Creo que es difícil que lleguen a un acuerdo a corto plazo. Ha habido oficiosamente encuentros y ofertas que Argentina desmiente, pero que las hay y es bueno para Argentina y Repsol solucionar el problema. Para Argentina, porque tiene un serio problema de insuficiencia energética y no tiene capacidad de solucionarlo porque requiere acuerdos con los inversores, un acuerdo con Repsol para limpiar el terreno porque son inversiones grandes y a largo plazo.

P.- Parece que se han resuelto algunos problemas con Brasil ¿España ha descubierto Brasil?
J. G.- Al llegar aquí había el problema de los inadmitidos en frontera con Brasil y con México, pero eso lo hemos solucionado porque no era bueno, no tanto por su volumen sino por la imagen que se daba.

P.- Le van llamar Jesús “el pacificador”…
J. G.- Trato de hacer honor a mi nombre… Pero bueno, el hecho es que para España la relación con Brasil es muy importante porque tenemos allí una inversión grande y hay un fuerte intercambio de personas, de estudiantes en Ciencias sin Fronteras, y hay que hacer un esfuerzo adicional porque con Brasil no tenemos la misma historia común que tenemos por ejemplo con Venezuela, que nos sirve es verdad tanto para entendernos como para pelearnos. Queremos trabajar con Brasil en proyectos conjuntos en el resto del mundo.

J. G.-¿Por qué Brasil tiene un cierto papel de liderazgo regional?
J. G.- Brasil está buscando ese papel, tiene un peso indudable en la región, a veces más activo, y en el mundo. Brasil  tendrá que definir cuál es la forma en la que ejerce ese peso. En todo caso, para España es importante tener esa relación cercana.
P.- ¿Ve usted nubarrones en el horizonte de la situación económica de Brasil?
J. G.- Hay un problema con los países emergentes. Esa década prodigiosa, de crecimiento a tasas chinas, posiblemente no se repita porque estaba vinculado a los ciclos de precios de materias primas. México es un buen ejemplo de cómo hacer transformaciones internas si se saben manejar las incertidumbres. Tienen un buen mercado interior, con unas clases medias frágiles que están saliendo la pobreza y un futuro muy importante en el contexto mundial, una vez que despejen las incógnitas con Mercosur, con la Union Europea, con los Estados Unidos… Brasil es un país con grandes perspectivas.

P.- ¿México también o está en apuros por la contestación reciente a las reformas de Peña Nieto?
J. G.- El Pacto por México es muy difícil porque cualquier reforma qe se haga – lo vemos en España – toca intereses, privilegios, inercias. Y aunque al inicio todo es de consenso, cuando llega la hora de la verdad, en el Parlamento o en la sociedad, se hace difícil. La reforma educativa, la energética, la tributaria, la de comunicaciones, dan la idea de por dónde quiere ir Peña Nieto que, ya le digo ahora, vendrá a España a primeros del año próximo.

P.- ¿A pesar de la crisis de Estados Unidos, México tiene también buenas perspectivas?
J. G.- Es que a Estados Unidos le va a ir bien. México es un país que está aprovechando su cercanía a EE.UU. Claro que ir muy cercano a su ciclo económico tiene a veces cierta desventaja. Pero a Estados Unidos les va a ir bien con el shale gas, con el que van a tener reservas energéticas que les van a convertir en exportadores dentro de poco tiempo. Y se están reubicando las industrias manufactureras que se habían ido a Asia,  en Estados Unidos y en México,  donde tienen capacidades tecnológicas y universitarias altísimas. En definitiva, ahí es donde debemos ir nosotros con la comunidad Iberoamericana, a buscar esa capacidad de conocimiento y de tecnología que es lo que nos dará la diferencia en el mundo futuro.
P.- Así sea.

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