Gildemeister culmina reestructuración y define ejecutivos en cargos clave

A la salida de Fernando Giner, se suma el arribo del ex ejecutivo de Copesa, Max Sichel a cargo de una gerencia nueva.

Por Paula Vargas 



Finalmente se concretó la anunciada reestructuración del grupo Gildemeister. A la salida de Fernando Giner, el emblemático ejecutivo que estuvo más de una década en el holding, se suma la llegada de Max Sichel, ex ejecutivo de Copesa, quien durante el próximo mes asumirá una gerencia nueva, que reportará directamente al presidente y CEO del holding, Ricardo Lessmann.

Según explicaron fuentes del grupo, Sichel será el puente entre las gerencias generales de Automotores Gildemeister de varios países donde la firma tiene presencia (Chile, Perú y Uruguay) y su CEO. Tal como ya lo había adelantado el propio Ricardo Lessmann hace unos meses, el objetivo de estos cambios es darle una nueva mirada a la organización, donde él deje de estar a cargo del día a día para enfocarse en temas más estratégicos. “Lo que viene es un ajuste para tener más tiempo y así dedicarme a desarrollar nuevos negocios”, comentó en una entrevista a 

Diario Financiero

en marzo de 2012.

Así las cosas, sólo continuarían dependiendo directamente de Lessmann las operaciones de Brasil y Centroamérica, donde cuentan con una estructura distinta y además son las únicas donde comparten la propiedad con socios locales.

Otro cambio es la eliminación de las vicepresidencias y en su reemplazo establecieron gerencias corporativas en las áreas comercial, marketing y recursos humanos, las que son comunes para todo el grupo.




El proceso


El año pasado se comenzaron a generar los primeros movimientos al interior de Gildemeister con miras a la nueva estructura. Armaron un esquema donde se mantenían los country manager y gerentes y se completaron las gerencias de Uruguay y Brasil. Además se dio forma a este nuevo cargo que dependerá directamente de Lessmann. Aunque los movimientos comenzaron hace unos meses, no fue sino hasta esta semana cuando se generaron los mayores ajustes. Primero con la renuncia de Fernando Giner, quien hasta el próximo mes está al mando de la gerencia corporativa de negocios automotriz de Minvest, cargo al que arribará el peruano Gonzalo Zúñiga, ejecutivo que actualmente lidera las operaciones del grupo en el país. Su reemplazo aún no estaría definido.

Otro cambio que se produjo en el último mes fue la llegada de Javier Calvo (ex ejecutivo de Viña Santa Rita) quien asumió la gerencia de desarrollo automotriz de Hyundai y Ford, gerencia que también se creó bajo el nuevo esquema.

Otro de los objetivos del grupo con esta reorganización es potenciar su expansión internacional y, de paso, preparar el camino para su futura apertura en bolsa. Actualmente tienen presencia en Chile, Perú, Brasil, Uruguay y Centroamérica, y su destino natural más inmediato sería Colombia.

Este año el grupo espera facturar unos US$ 2.000 millones y la meta es duplicar las ventas hacia 2016, año en que podrían concretar su aspiración de abrirse al mercado de capitales.

Para alcanzar esta meta es clave el crecimiento en los mercados donde actualmente tiene presencia, particularmente fuera de Chile.

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