China registró un déficit comercial leve de
US$ 884 millones en marzo, ya que las importaciones subieron un inesperado 14,1% frente al año anterior, eclipsando el alza de 10% de las exportaciones, lo que señala que la demanda doméstica está reuniendo el impulso necesario para impulsar la recuperación económica.
Los datos de la Administración de Aduanas, entregados ayer, mostraron que el crecimiento de las importaciones estuvo muy por encima del 5,2% esperado.
Eso dejó a China con un déficit comercial, en lugar del superávit de US$ 15.400 millones que se esperaba.
“El crecimiento en las importaciones mejor de lo esperado en marzo sugiere que el ciclo está llegando a un punto de quiebre”, dijo a Reuters Haibin Zhu, economista jefe para China de JPMorgan. “Si la demanda doméstica resulta ser más sólida de lo esperado, eso es definitivamente positivo para la perspectiva económica”, agregó.
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