Lázaro Calderón, socio de Ripley, habla del arribo a Colombia y de cómo viene el 2013

 
Es optimista del futuro y de las perspectivas económicas del "eje Pacífico", donde están invirtiendo. Pero advierte de los efectos que puede tener la combinación de proyectos regulatorios para el retail financiero en Chile: "Tengamos cuidado con la sobrerregulación". A. G.  
 
Desde 2004 que Lázaro Calderón no corre maratones. La última fue en Chicago, pero luego, por las lesiones derivadas del mismo deporte -que sigue practicando cinco veces a la semana-, no pudo seguir entrenando con ese nivel de exigencia.

"Me gustaría volver a correr otra maratón", dice este empresario, quien como gerente general de Ripley y miembro de la familia controladora de esta multitienda, está en otra carrera: el arribo a Colombia, el tercer mercado en el que Ripley desembarca, detrás de Chile y Perú; la apertura de un nuevo mall , esta vez en Concepción -que para Calderón tiene un sabor especial, pues tomó forma después del terremoto, en el que invirtieron US$ 100 millones y dará empleo a 1.800 personas-, y ver los frutos de la apertura de la tienda en el Costanera Center.

Esta última no es la más grande para Ripley -primero está la de Parque Arauco y luego la de Jockey Plaza, en Lima-, pero sí la mayor en superficie dentro del mall de Providencia.
"Yo firmé esta tienda antes que tuvieran Paris", rememora Calderón sobre el acuerdo rubricado hace años con Cencosud.

En ella echaron toda la carne a la parrilla, con tecnología que ahora están llevando a otras tiendas. En un recorrido por este local, Lázaro Calderón (49 años, cinco hijos) mostró algunos de estos avances: los probadores de mujeres que incluyen una pasarela; catálogos digitales para comparar productos y simplificar la compra de bienes durables, y salas para el descanso ambientadas en cada piso, entre otros.

Y en este mismo recorrido, el máximo ejecutivo de Ripley habló también de todo, de los planes de la empresa, de lo que viene para 2013, de la morosidad y de las regulaciones

Regulación y morosidad
"Yo partí en 1983 barriendo, y me tocaba hacer el turno de abrir y cerrar. Tenía que hacer la cuadratura de cajas ¡a mano! Recuerdo que había tres tiendas: Bandera 637, Huérfanos 967 y San Diego 200". Y continúa: "Con mis hermanos, todos, en el "servicio militar". Nos tocó esa parte del rigor, dejando cosas de lado", rememora este contador auditor, ex alumno del Grange.

"Era un sueño de mis viejos, por el inglés", indica el líder ejecutivo de la multitienda, afanado ahora con el arribo a Colombia.
"Es parte de un plan estratégico que se apoya en el eje Pacífico", precisa. El proyecto global de negocios privilegia tres mercados, que suman 90 millones de habitantes, de los cuales 50 millones los aportará el país cafetalero."El día de mañana Colombia puede ser el país número uno de Ripley", anticipa Calderón (ver relacionado).

-Ripley vio una baja de 58% en sus ganancias a junio. ¿Cómo van a revertirlo?
"Es importante tener claro cuáles son los elementos que hicieron que la industria en general cayera en sus resultados. Por ejemplo, el precio de las materias primas, del algodón, llegó a tres veces el precio actual e histórico (un peak de US$ 2,60 la libra). Y el consumidor no tuvo la capacidad de llegar a los nuevos niveles de precios, exigió que los precios tendieran a la baja, y los márgenes bajaron. El segundo elemento, y bien importante, es que en términos generales hubo un aumento de la morosidad en la industria. Es un tema que vimos entre otras cosas por el famoso borronazo (de Dicom), que creo que también tuvo algún grado de impacto, porque mucha gente pensó que implicaba no pagar lo que se debía".

-Se ha especulado que la morosidad en Ripley llegó al 24%.
"No. El dato exacto es 11% al día 30 y al día 90, se reduce al 5%. En general, Ripley ha sido muy prudente con el crédito. Hemos privilegiado el (manejo) del riesgo por sobre la agresividad. Una de las razones por las cuales nuestra cartera no ha crecido en forma más vigorosa es que hemos focalizado el tema riesgo, por la experiencia que ya vivimos en 2008".

-Hay estimaciones que indican que a partir del mes de junio se ha disparado la morosidad como industria.

"Yo no puedo decir eso como Ripley. No veo indicadores de aumento de la morosidad. En los informes del Banco Central, el sobreendeudamiento está claro que no es tema. De los ingresos reales de las personas, más o menos el 15% va a los créditos de consumo. En el caso de Ripley, la deuda promedio es de 325 mil a 330 mil pesos. El ingreso promedio de la gente que tiene crédito en Ripley le da para cubrir eso y la carga es del 10%, o menor. Entonces, esos niveles nos permiten estar bastante tranquilos, no tan agresivos en el crecimiento de cartera, y sí bastante restrictivos en las políticas de riesgo".
-Las cifras oficiales indican que en los estratos bajos el 60% del ingreso se va a pagar deuda. ¿No ve riesgo de sobreendeudamiento?
"En términos globales, no. En términos globales, el consumidor chileno toma buenas decisiones de endeudamiento".

-¿Qué grado de responsabilidad tuvo la regulación, que los deudores hasta cierto monto hayan sido borrados de Dicom, en la morosidad?

"Es difícil decir qué grado. Pero lamentablemente tal vez faltó una explicación, el borronazo algunos lo entendieron como que no tenían que pagar lo adeudado. 
Afortunadamente, todo lo anterior tampoco llegó a indicadores alarmantes. Pero cualquier cambio de tendencia genera estos baches de resultados. Esos dos efectos no los vamos a ver más. Porque el precio del algodón ha tendido a la baja, y la morosidad -como la base de Dicom se vuelve a repoblar-, ya empieza a ser bastante más confiable la información. Quiero entender que estos dos elementos son dos cosas que no deberíamos ver repetidos en el segundo semestre. Hoy, los elementos base de la economía chilena -desempleo, aumento de los sueldos reales, baja inflación proyectada- son muy buenos indicadores. Y en el eje Pacífico, los tres países anotan indicadores muy sanos, con crecimientos de entre 4 y 6%".

-¿Fue un error de la regulación?
"Creo que el espíritu de la ley Dicom iba hacia otro lado. Y este pudo ser uno de los elementos que no se gobernaron bien. Esa ley tiene bastantes cosas positivas y tal vez algunas que merecieron ser mejor explicadas".

No sobrerregular
-Hay proyectos en curso como la tasa máxima, el Sernac Financiero. ¿Perjudica esta nueva regulación?
"Creo que hay que tener mucho cuidado en sobrerregular la industria; hay que ser cauto en eso. El Sernac Financiero tiene elementos muy positivos, genera más transparencia, pero también puede generar la industria del reclamo. Esperemos que eso no tenga una escalada".

"Con respecto a la combinación de proyectos de ley, que tienen que ver con el mundo del retail financiero, hago un llamado a que no sobrerregulemos una industria que ha generado valor en el tiempo. Tanto es así, que los empresarios chilenos hemos salido a exportar el modelo (...) Tengamos cuidado con dejar fuera del mundo financiero, por ejemplo, por fijaciones de tasas en límites que al final del día podrían dejar a muchos miles de chilenos en el crédito absolutamente informal".

-¿El proyecto de bajar la tasa máxima va en la dirección errada entonces?
"Yo no soy amigo de las fijaciones de precio. Lo que yo he tratado de conversar con las distintas autoridades es que seamos criteriosos con las decisiones que estemos tomando como país y no que una decisión que pudiese ser muy auspiciosa a corto plazo, pueda traer elementos negativos en el mediano y largo plazo. (...) Como retail financiero, hemos tratado de entregar posiciones. Algunas de ellas han sido recogidas. Por eso digo que tengamos cuidado con la sobrerregulación, porque hay cosas que han sido bastante positivas. Todo lo que vaya en torno a la transparencia lo encuentro realmente bueno para que el consumidor pueda ver (...) Cuando tienes un conjunto de medidas, la combinación y el hacerlas todas en el mismo instante genera reacciones distintas. Hay un conjunto de leyes que se están tramitando. El llamado es a ser cauto".

-Está en consulta la nueva regulación de la SBIF sobre los emisores no bancarios. ¿Los homologa al tratamiento del sistema bancario?
"La autoridad tiene hoy día elementos más que suficientes para poder controlar las variables relevantes del retail financiero. Hoy, los distintos entes reguladores pueden, con las atribuciones que tienen, ver los elementos relevantes que no generen problemas sistémicos. Tenemos la SVS (Superintendencia de Valores y Seguros), la SBIF (Superintendencia de Bancos) y el Sernac. Tres entes reguladores. Cualquier perfeccionamiento puede ser bienvenido. Lo que hay que ver es hacia dónde apunta. Estamos disponibles a ver perfeccionamientos, pero tengamos cuidado".

-¿Las perspectivas para lo que queda de 2012 y 2013 son de mayor riesgo o de mejoría?
"De cara a lo que pasó en el primer semestre, en que las materias primas están tendiendo a la baja, quiero creer que hay un ambiente en general de moderado a positivo. Ahora, eso no nos debe hacer bajar la guardia de lo que está pasando en el mercado nacional y extranjero. Gracias al muy buen manejo de las autoridades, no hemos visto grandes impactos, pero hay que estar atentos a qué pasa con China, con la solución o no del problema europeo. Hay que ver qué pasa con Estados Unidos. Hay que buscar las oportunidades, con prudencia".

"Con respecto a los proyectos de ley, que tienen que ver con el mundo del retail financiero, hago un llamado a que no sobrerregulemos".
Las nuevas generaciones: "Mis hermanos están muy comprometidos, son dos directores muy activos. Ambos tienen hijos chicos y pueden ser una variable de continuidad".

Evaluación al Gobierno: "Ha hecho un trabajo en terreno incansable. Ha trabajado de sol a sol por cumplir las cosas que prometió a la ciudadanía. Tengo una alta estima por la gente que trabaja en el Gobierno".

Alza de impuestos "Soy un fan de que la educación tiene que mejorar. Nuestros indicadores de competitividad no necesariamente son de exportación. Así es que si ese dinero va a la educación, va en el camino correcto y yo como empresario estoy contento".
 Costanera Center: "No ha canibalizado la venta de las otras sucursales"

-¿Les satisfacen los resultados de Costanera Center?
"Los indicadores de esa tienda han superado las expectativas que nosotros teníamos. De ella vamos a sacar cosas a otras sucursales, en particular a Mall del Centro, en Concepción. La tienda está un 18% mejor en venta por metro cuadrado respecto de lo estimado. Y eso es muy bueno, porque nosotros tenemos presupuestos bastante ambiciosos. Lo otro importante es que no ha canibalizado las ventas de las otras sucursales en forma relevante. Ha sido bastante leve. Eso es producto de que Ripley no tenía presencia en la zona de Providencia y Ñuñoa, que son los mercados que están convergiendo a ese centro comercial".

-¿La venta de las tiendas de Parque Arauco, Alto Las Condes incluso La Dehesa ha caído, pero ha sido marginal?

"Marginalmente. Cualquier número menos de 5% en el inicio. Y con el tiempo disipándose, tendiendo casi a cero. Ese indicador es más que bueno. Es una buena noticia, porque más que vender mucho, lo importante es la venta marginal".

-Ustedes acusaron un impacto del retraso de la apertura de Costanera Center. ¿Van a negociar o activar cláusulas para resarcirse de esa pérdida con Cencosud?

"Aunque uno no lo crea, en el negocio nuestro la mercadería tiene fecha de vencimiento. Una parca o un chaleco no se puede vender en octubre. Obviamente los retrasos implican que esa mercadería que ya tienes comprada -en un período no menor a seis meses-, en algún minuto tienes que tomar la decisión de cuándo abrir. Aquí hubo cláusulas, pero entendemos que hubo elementos de fuerza mayor, permisos públicos y otra serie de cosas que nosotros -que también estamos en el rubro inmobiliario- lo entendemos. Y bueno, hay que apretar los dientes y ver por dónde seguir optimizando. Por este retraso no hubo una compensación solicitada. Entendemos que un proyecto de esta envergadura, un proyecto país como el de Cencosud, y que celebramos la inversión de empresarios en este tipo de proyectos, tienen ciertos bemoles y nosotros lo que hacemos es generar valor a partir de hoy, que ya está abierto. Son proyectos de largo plazo, 30 años de arriendo. En ese período vamos a compensar con creces".

Suben la apuesta en Colombia: Más tiendas y un banco en unos añosRipley está desembarcando en Colombia, un mercado que atrae al retail chileno desde hace años y cuyo interés no amaina, como quedó demostrado con la compra de Carrefour por parte de Cencosud.

En el país cafetero, la tienda de los cinco continentes ya tiene contratos firmados para abrir 10 tiendas, que incluyen acuerdos con operadores locales como Grupo Éxito e Inversiones La 14. Pero en el plan a 2015 tiene contemplado sumar otros cinco nuevos proyectos, explica Lázaro Calderón. "Son conversaciones que estamos sosteniendo y que deberíamos llegar a concretarlas. Estamos evaluando un pool de tiendas para llegar a definir cuáles son las cinco que vamos a elegir", dice sobre estas tiendas adicionales en camino.

Aunque prefiere no profundizar en las ubicaciones, sí indica que pueden incluir ciudades distintas a las que contemplan los acuerdos ya firmados, con los que ya tiene asegurado su arribo a Bogotá, Bucaramanga, Barranquilla, Villavicencio, Neiva y Envigado (Medellín).
"No hemos llegado ni a Cali ni a Pasto", grafica Calderón, quien revela que también este arribo irá acompañado del negocio financiero, que partirá con la tarjeta y créditos, bajo la sociedad Ripley Compañía de Financiamiento, pero que en el mediano plazo será banco.
"Vamos a migrar a banco después de un período que estimamos va a ser del orden de dos a tres años para hacer las tramitaciones".

Las cifras del Plan Pacífico
El plan Eje Pacífico, como lo llaman, se enfoca en una población de 90 millones de habitantes entre Chile, Perú y Colombia.

Contempla US$ 1.008 millones de inversión al 2015, de los cuales US$ 350 millones corresponden a inversión pura y dura, mientras el diferencial concierne a capital de trabajo para los distintos mercados.

De esos US$ 350 millones, US$ 50 millones se destinarán a Chile, mientras que para Perú y Colombia irán US$ 130 millones en cada uno. El saldo de US$ 40 millones será para Ripley Corp.

En total, equivale a 41 nuevas tiendas al 2015 entre los distintos mercados. Descontando las ya abiertas en este año -Costanera Center, Concepción, Chimbote y Santa Anita en Perú, entre otras-, lo que viene para Ripley son 4 aperturas en Chile, 15 en Perú y 15 en Colombia, mercado donde debutará el primer semestre de 2013.

-¿Cuándo viene el cuarto mercado? ¿Siguen las conversaciones en México con el grupo Palacio de Hierro, del grupo Bal?

"Una vez que estemos asentados en Colombia, que sea una realidad y lleguemos a los niveles de eficiencia que pretendemos, podremos pensar en otro mercado, que hay muchos que nos gustan. Pero hasta que eso no termine no creo que sea prudente generar alguna distracción... una vez que avancemos en Colombia podríamos empezar a pensar, por qué no, en México. Tenemos extraordinarias relaciones con el grupo Bal".
-¿Brasil se ve más lejano?

"Para poder dar una opinión con sustento, habría que hacer un análisis más profundo (...) Después que estemos solidificados en Colombia, pensaremos en otras alternativas. La prudencia también invita".

http://diario.elmercurio.com