Resulta difícil pensar que una empresa del grupo Cencosud sufra una clausura municipal por la falta de un documento de control; una millonaria inversión no toma riesgos tan absurdos. Pero, de ser así, lo más sano es que el peso de la ordenanza caiga para cada uno de los casos donde existen infracciones, poniendo en pie de igualdad a todos comercios de la ciudad.
Sin poner en tela de juicio el accionar de la comuna, es preciso recordar que la mencionada firma viene siendo objeto de estrictos controles. A funcionarios y concejales parecen llamarles la atención, de un tiempo a esta parte, los carteles de publicidad o los productos ofrecidos a cielo abierto dentro del predio de Easy.
La promoción del empleo y el desaliento de la actividad privada deben ser antítesis en el entendimiento del Estado. No es lo mismo crear cargos en la administración pública que fomentar el empleo a través de la inversión.
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