Presidente francés lucha por recuperar su autoridad

La justicia francesa inició ayer una investigación preliminar al financiamiento recibido por el partido del presidente durante la campaña electoral de 2007. El presidente enfrenta acusaciones, hasta ahora no probadas, de que los fondos habrían incluido una donación ilegal de Liliane Bettencourt, la mujer más rica de Francia y heredera del imperio de cosméticos L"Oreal. 

Eric Woerth, ministro a cargo de la reforma al sistema de pensiones, que ha provocado manifestaciones de rechazo masivas, ha sido acusado de dar un tratamiento favorable a la multimillonaria cuando era ministro de Presupuesto, a cargo de las autoridades tributarias. Su esposa era hasta hace poco asesora en la firma de inversiones que gestiona el patrimonio de Bettencourt.

La posición de Sarkozy no está aún amenazada, pero se encuentra en un momento de inestabilidad, con bajos niveles de aprobación popular.

El presidente intentó ayer recuperar su autoridad a través del primer ministro François Fillon, quien aseguró que una reorganización del gabinete no era una "prioridad política", descartando que se adelanten los planes de realizar cambios en octubre.

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