Suena como el candidato a quedarse con el 100% de Chilevisión, pero al menos, como relatan en el mismo fondo de inversión Bethia, la decisión no está tomada.
El jueves pasado el propio Presidente Sebastián Piñera informó a parlamentarios de la Coalición por el Cambio que Chilevisión sería vendido en un par de semanas, dejando entrever que hay cuatro interesados por la estación privada.
Uno de ellos sería Bethia, el mismo family office -ligado a Liliana Solari- que compró en marzo el 8% de LAN Airlines, el cual estaría dispuesto a pagar US$ 140 millones por el canal del presidente.
Pero el holding que hoy maneja activos en aerolíneas, transportes, retail, inmobiliarias y en el sector agropecuario está lejos aún de ser el gran candidato para quedarse con Chilevisión, como afirman desde el mismo fondo.
Según trascendió, el directorio de Bethia aún no decide si responderán a la invitación hecha por LarrainVial, llamado que tiene como fecha límite el 31 de julio.
De acuerdo a estas versiones, fue el propio banco de inversión mandatado para esta tarea el que contactó a Bethia, al igual que a otros posibles interesados, incluyendo a operadores nacionales e internacionales
De todas maneras, durante estas semanas los ejecutivos de Bethia accederán a las cifras del canal a través del "data room", y esperan seguir recibiendo retroalimentación de parte de los vendedores, para tomar la decisión durante las siguientes jornadas. Lo más probable este jueves.
Integración de ejecutivos
Uno de los puntos que podría inclinar la balanza a favor de alguno de los candidatos -uno chileno y tres internacionales- sería el poder integrar en sus filas a los principales ejecutivos de Chilevisión, fórmula que empleó la fallida oferta realizada por Linzor Capital.
Esta opción no ha sido descartada por Bethia y, tal como relató un ejecutivo del fondo, se espera tener acercamientos con los funcionarios en estos días, para ver si, de tomar la alternativa de comprar Chilevisión, incluirlos con algún porcentaje de la propiedad.
La concesión
Para evitar que lo que ocasionó el retiro de Linzor Capital se repita, los interesados en Chilevisión estarían solicitando seguridad en la continuidad de la concesión, hoy en manos de la Universidad de Chile, y cuyo usufructo tiene fecha de renovación en 2018, y que debe ser aprobada por el plantel en 2013.
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