A unos US$ 4.500 millones ascenderían las pérdidas sólo en infraestructura y edificación habitacional producto del terremoto, según estimaciones de IMTrust.
De acuerdo a la corredora, los US$ 30.000 millones que algunas fuentes han estimado de pérdidas serían excesivas ya que serían como máximo US$ 8.000 millones, equivalentes a un 5% del PIB, y un 10% del stock de la zona más golpeada.
El estudio también señala que unos US$ 1.500 millones serían en pérdidas en edificación comercial e industrial.
IMTrust además señala que el terremoto es "una pérdida neta de riqueza" y que la caída en el crecimiento será de "casi un punto mientras no se recupere enteramente el capital perdido".
Esta baja estaría concentrada mayormente en el segundo semestre 2010 (1,2% menos, 2,4% anualizado). Sin embargo, el crecimiento se normalizaría en dos años.
Asimismo, indican que el fisco "podría levantar unos US$ 2.500 millones en los mercados internacionales casi sin aviso".
Además esta pérdida debería ser compensada por la mayor inversión que se verá en el mediano plazo y que será necesaria para recuperar el capital perdido a través del futuro proceso de reconstrucción.
En relación a los efectos que tendría sobre el tipo de cambio, esperan que este suba a $ 542.
Respecto a las consecuencias que estas proyecciones tendrán sobre el mercado bursátil local, en la corredora estiman que el impacto negativo sobre el IPSA será de un 0,3%, un efecto proporcional al de la economía y el cual consideran como un "efecto despreciable" debido a la próxima normalización de los niveles de crecimiento.
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