En promedio, casi el 90% de las pólizas contra terremoto en Chile están reaseguradas con alguna entidad extranjera, las que asumirán gran parte del costo por siniestros en el país y elevarán a futuro los valores.
por Héctor Cárcamo
El terremoto que azotó al centro y sur del país hace siete días no tendrá sólo costos inmediatos en la cobertura de los siniestros por los daños en viviendas e infraestructura pública y privada. También tendrá otras consecuencias. Uno de los primeros efectos será el alza que experimentará el precio del seguro que cubre diversos daños, en particular las pólizas por terremotos. También afectará la prima que se paga en vehículos y los seguros contra actos vandálicos y atentados, creen expertos.
Las aseguradoras no deberán financiar todo el costo de los siniestros por este terremoto, ya que una gran parte de él está reasegurado; es decir, la compañía local paga a una tercera empresa -normalmente, grandes multinacionales del rubro- una prima anual para cubrirse en el evento de una catástrofe como la que ocurrió en Chile. Lo que en definitiva las aseguradoras locales financian de sus recursos es una parte menor: un alto ejecutivo de la industria local dice que no es más de un 10% a 15% en promedio, aunque varía mucho, según la cobertura del riesgo de cada firma.
Sebastián Deutsch, gerente general de JIS Chile, uno de los principales broker del mercado de seguros y reaseguros, explica que si bien a nivel internacional se esperaba desde hace varios años, estadísticamente, que ocurriera un sismo como el actual, es muy probable que suba la tasa del reaseguro, lo que tendrá un impacto a nivel local. "Las tasas deberían subir, todo efecto catastrófico genera un alza de tasas en Chile", señala, añadiendo que el precio cobrado en el país es inferior a lo que se exige a nivel internacional. La cifra, en definitiva, debería tender a equilibrarse con dichos mercado.
Sin embargo, Deutsch estima que las aseguradoras no podrán elevar demasiado el cobro y tendrían que diversificar el reaseguro o elevarlo. "No puede subir mucho el precio, porque si no, no vende; la única forma de subir menos el precio es que parte de lo que retenga se lo ceda a alguien", afirma.
El director de compañías de seguro de Fitchratings, Rodrigo Salas, coincide en que habrá alza. "Por efecto de los reaseguros, los seguros serán más caros y las compañías tendrán que traspasar a precio, con lo cual podrían recuperar una parte de lo que siniestren ahora", explica.
El gerente general de una importante aseguradora del país no tiene dudas sobre el incremento que viene. "La materia prima de las compañías de seguro es el reaseguro y en un evento en que todos hablan de US$ 4 mil millones en siniestros, gran parte lo va a pagar el reasegurador, por lo que, de todas maneras, va a subir", asegura.
El presidente de la Asociación de Aseguradores de Chile, Mikel Uriarte, es más cauto. "El costo del reaseguro catastrófico depende del mercado exterior, no del mercadol local. Podría suceder que existan grandes catástrofes en distintas partes del mundo y, por lo tanto, va a subir el costo, pero si se vive un año donde no hay muchas catástrofes en el planeta, y donde hay exceso de liquidez en el mercado, quizás no sube", señala.
El otro impacto del terremoto lo sufrirán las aseguradoras. Si bien parece no haber riesgos de solvencia, si habrá pérdidas. "Por lo menos este siniestro va a generar pérdidas este año y el próximo... muertos no va haber, pero habrá heridos y de las heridas te curas", afirma Deutsch, quien estima que los siniestros a pagar equivalen a más de dos años de primas. Además, prevé que suban los siniestros "normales", por mayores accidentes automovilísticos y domésticos derivados del impacto del terremoto en caminos y viviendas.
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