Ibáñez se cuadra "El saqueo lo viví con mucha pena"

Concepción, antes del mediodía, ofrece una imagen de calma. La ciudad, devastada por un violento terremoto hace una semana, es un desierto antes de que se levante el toque de queda impuesto por la autoridad.

El hipermercado Lider, ubicado en el límite entre Concepción y Talcahuano, pese a la calma que vive la ciudad, es un hervidero: la ayuda enviada por el gobierno central aterrizó en el estacionamiento de este centro comercial, y los voluntarios, militares y policías, transitan rápido para organizar la distribución de los alimentos.

Entre esta gran masa de personas un uniformado de la Armada, hablando en inglés con algunos ejecutivos de la cadena de retail, circula por los pasillos de Lider. Se trata de Nicolás Ibáñez, ex controlador de D&S y que hoy, junto a su hermano Felipe, mantienen casi un cuarto del holding supermercadista, el cual fue vendido a Walmart hace un año.

Nicolás, quien es reservista de esta rama castrense, ayuda a ordenar el panorama para dar paso previo a la apertura parcial del local (casi el único supermercado no saqueado de la urbe), trabajo que viene realizando desde el pasado sábado, a sólo horas de haber ocurrido el terremoto y posterior tsunami en la zona centro sur de Chile.

El empresario, quien fue sorprendido por el sismo en su casa de veraneo en Panguipulli, comenta que de inmediato se trasladó a la zona del epicentro, viviendo en esa ciudad una de las imágenes que marcaron esta tragedia: el violento saqueo -que luego dio paso a otros en Concepción- del Lider del Barrio Estación.

Un momento que no será fácil de olvidar, comenta. Ahora su foco de atención está en mantener el orden en la ciudad, para asegurar el normal funcionamiento de los negocios.

-¿Cómo vive la compañía esta tragedia?

- Estos momentos difíciles son momentos y oportunidades para fortalecer nuestros principios y nuestros valores, y focalizarnos en la tarea que teníamos y que tenemos. Sin lugar a dudas que detrás de toda crisis hay una o más oportunidades para mancomunar los esfuerzos, y para poner el cuerpo y el alma donde corresponda que esté y, en el caso nuestro, en la normalización de los servicios de abastecimiento de productos esenciales para toda la población.

Estamos muy contentos ahora de que se hayan decretado las medidas pertinentes que nos permiten trabajar con tranquilidad, y por ello estamos muy felices de abrir este local y éste será el comienzo del fin del desastre en esta zona.

-¿Con las medidas pertinentes, se refiere a que se haya puesto orden y seguridad?

-Exacto. Todos entendíamos que era importante el restablecimiento de un flujo normal para las personas, para quienes están trabajando en la reconstrucción, y para quienes deben abastecer estos locales. Ahí estaba la clave y debido a que se tomaron las decisiones, independiente de si a tiempo o no, en pocos momentos más abriremos este local para que el público pueda empezar a abastecerse normalmente, sin perjuicio de toda la ayuda solidaria de la cual somos parte y en la cual estamos colaborando por diversas vías.

- Lider se transformó en protagonista de esta catástrofe por ser el primer local saqueado.

-Yo estaba aquí. Y el saqueo lo viví con mucha pena no por lo que se perdía, sino por la reacción de la gente. Fue una situación penosa, desesperada y dramática, pero yo creo que todo ello es parte de la historia y hoy estamos abocados a reconstruir y a apoyar el futuro desarrollo de este país.

Creemos que en el corto plazo se restablecerá el 100% de la cadena de abastecimiento y como se dice: lo pasado, pasado está. Ya habrá momentos para hacer las reflexiones y evaluaciones del caso.

- ¿Usted está aquí como dueño de D&S o como miembro de la Armada?

-Como muchos saben, yo soy un reservista más de la Armada. Hay miles de reservistas y como corresponde, no sólo soy un trabajador de Lider, sino que además debo estar al servicio del país y obviamente que me presenté como tal.

-¿Cuándo se presentó y en qué consiste su trabajo en esta zona?

-El sábado ya estaba al servicio de la Armada. Me vine el sábado de inmediato desde Panguipulli, donde estaba de vacaciones. Lo que he hecho ha sido esencialmente labores de orden. La prioridad que tenemos acá es esa, el normalizar el abastecimiento de los productos esenciales, así que a ello estoy abocado y siempre a las órdenes de mis superiores en el Cuerpo de Infantería.

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