El organismo mezcló sus habituales frases de aprobación al rumbo general de la política económica con advertencias sobre las cuentas oficiales, el déficit, que ha venido creciendo, y la deuda externa.
La misión del Fondo Monetario Internacional (FMI) que visita periodicamente el país mezcló esta vez sus habituales frases de aprobación al rumbo general de la política económica con advertencias sobre las cuentas oficiales, el déficit, que ha venido creciendo, y la deuda externa.
Tras hacer su diagnóstico, el Fondo llegó a la conclusión de que el gobierno debe llevar al Congreso una verdadera reforma tributaria estructural.
Al respecto el jefe de la misión, Marco Pignon, sostuvo que esta reforma, más allá de conseguir ingresos adicionales para el Gobierno. Se trata, más bien, de darle al país ventajas en materia de eficiencia, porque al ampliar la base y reducir distorsiones como las exenciones, se crearían mejores condiciones para que el aparato productivo opere mejor, preparando así a la economía para responder mejor a posibles choques.
En sucesivas reformas tributarias se han otorgado exenciones que privilegian a ciertos sectores con ventajas a la hora de liquidar y pagar sus impuestos.
El FMI señala que es preciso que el país cuente con un marco fiscal de largo plazo, que garantice que el PIB del país crezca a un ritmo sostenido.
El Fondo Monerario le recomendó al gobierno ajustar todavía más su nivel de gastos y ejecutar cambios de tipo estructural que hagan posible la reducción progresiva del déficit fiscal, proyectado este año en 4,5 por ciento como porcentaje del PIB para el Gobierno Central.
Al concluir la primera visita de revisión de la economía colombiana del año, que se prolongó durante 15 días, el jefe de la misión del FMI sostuvo que es preciso adoptar una política que lleve a una reducción gradual de los déficit fiscales (tanto para gobierno central como para el sector público consolidado), al igual que de la deuda externa.
Según el representante del organismo multilateral, si bien el ciclo económico contribuirá en este propósito, la responsabilidad también recaerá en las autoridades colombianas cuando elaboren el marco fiscal de mediano plazo, incorporándole nuevos elementos.
De otra parte, Piñón también señaló que el país tendrá que comenzar a discutir los términos en que se debe plantear una reforma laboral, con la ayuda de expertos en el tema.
El Fondo destacó que la política económica, antes y durante la crisis global, fue la adecuada para reducir el impacto sobre Colombia. El Fondo proyecta que este año el país crecerá entre 2 por ciento y 2,5 por ciento.
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