2008/07/06

El comercio electrónico crece en Latinoamérica

Las empresas de la región, desde tiendas detallistas hasta líneas aéreas, pasando por florerías y librerías, se posicionan y dependen cada vez más de sus ventas en línea.

Si alguien lo ha comprendido al máximo es Marcos Galperín, fundador y presidente de MercadoLibre. No es casual que en 2007 haya facturado 85.1 millones de dólares, 63% más que el año anterior, lo cual le generó ganancias por 9.4 millones de dólares. No sólo eso. Su facturación bruta creció 65.4%, hasta los 66.1 millones de dólares, con un margen bruto de 77.7%.

El crecimiento de MercadoLibre y del comercio electrónico va en serio. Aún cuando la influencia de internet es todavía baja en comparación con la de los países desarrollados, donde supera 50%.
En Chile, el país con la cifra más alta de la región, está por encima de 40%, de acuerdo con varios estudios. En Argentina se sitúa entre 35% y 40%, mientras que en Brasil y México es de entre 18% y 21%.

Sin embargo, las perspectivas son buenas. “En los próximos cinco a diez años la cifra llegará como mínimo a 50%”, dijo Galperín. Los responsables serán el crecimiento de la banda ancha y la influencia de las PC en los hogares. Esto convertirá a internet en un medio cada vez más rápido y cómodo, lo cual provocará que la gente se entusiasme en utilizarlo para comprar.

“El comercio electrónico aún es muy incipiente. En 2007 hicimos transacciones por 1,500 millones de dólares, que es un pequeño porcentaje del total del comercio en la región”, dijo Galperín. “Esto se va a transformar en algo que la gente hará todos los días”.

Además, se calcula que cerca de 40% de la población de América Latina tiene menos de 20 años, lo que significa que se está incubando un gran poder de compra en línea. “Hace 10 años un niño empezaba a tener conciencia del mundo internet y hoy es un joven que ya pasó toda su adolescencia en él”, dijo al respecto Gonzalo Palacios, gerente de tecnología y servicios de e-business de FedEx Express México.

“De acuerdo con cifras de IBOPE, los compradores habituales por internet apenas alcanzan los 10 millones. Considerando que la mitad de la población de aproximadamente 191 millones es muy joven o sin recursos para tener acceso a internet, existe un mercado potencial de entre 90 y 100 millones de personas.

Para otros, ver internet como negocio aparte ha sido la clave. La cadena de franquicias Falabella, creó falabella.com el sitio detallista chileno se planteó en un principio como una “empresa” dentro de Falabella, y no como un canal de ventas de la gran tienda. “Tiene un plan estratégico, misión y objetivos propios”, dijo Ricardo Alonso, gerente de Falabella.com, a cargo de las operaciones en Argentina, Chile, Perú y Colombia.

Por eso, aunque las casas comerciales tradicionales encuentran en el ciberespacio una oportunidad para promover el uso de sus tarjetas propias y aumentar su negocio financiero, se preocupan de no excluir otras formas de pago. “Tener un abanico amplio para que el cliente elija cómo pagar es clave”, dijo Ricardo Alonso, gerente de Falabella Internet. “Además, inicialmente el consumidor estaba restringido al segmento ABC1, que no es usuario de tarjetas de tiendas, sino de tarjetas bancarias”.

La influencia de las tarjetas de crédito es uno de los mejores amigos de los detallistas-e. Brasil tiene la influencia más alta en América Latina, con 46% y 87 millones de plásticos. Las proyecciones apuntan a terminar 2008 con 52.5%.

Lo cierto es que en el ciberespacio hay lugar para todos. A Falabella.cl, el sitio dominante en Chile, reportó la encuesta de América Economía Intelligence, no le preocupa la competencia de sitios como MercadoLibre, que pueden tener una oferta infinita de artículos.

El Diario Critico

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