Se espera que las provincias aprovechen el renovado interés de los inversionistas.
Argentina podría emitir US$ 30 mil millones de deuda este año, conforme otros emisores intentan imitar el éxito del gobierno en volver a los mercados internacionales de capital con una venta exitosa de bonos el mes pasado.
Los primeros son los gobiernos provinciales de Argentina, que se espera que emitan al menos US$ 4 mil millones este año. Ellos esperan aprovechar el renovado interés de los inversionistas en un país previamente aislado de los mercados de bonos debido a una disputa prolongada con acreedores, la cual comenzó debido a un incumplimiento en 2001 de casi US$ 100 mil millones de deuda.
"La deuda de Argentina representa una extraordinaria oportunidad. Este tipo de rendimiento no existe en ninguna otra parte del mundo en países con niveles tan bajos de deuda", dijo Facundo Gómez Minujín, director general de la unidad argentina de JPMorgan.
El promedio del rendimiento de la emisión de la deuda de US$ 16.500 millones de Argentina, finalizado el 19 de abril, fue de 7,2%. Mientras tanto, la deuda pública constituye 44% del PIB, de la cual 17% constituye la deuda con el sector privado, según los funcionarios.
"Tal vez sea un momento complicado a nivel global, pero la búsqueda del rendimiento siempre existirá", dijo Gómez Minujín, quien estima que entre el gobierno central, los gobiernos provinciales y el sector corporativo, Argentina podría emitir cerca de US$ 30 mil millones de deuda este año.
Se espera que las provincias de Neuquén, Mendoza y Córdoba entren al mercado el próximo mes, y que la ciudad de Buenos Aires seguirá próximamente, según Luis Caputo, el ministro de Finanzas.
La expansión de la emisión de deuda por parte de las provincias de Argentina se puede explicar por la iniciativa del gobierno de bajar la inflación, actualmente de 34%. La inflación es alta en parte debido a la disposición del gobierno anterior de financiar la deuda provincial al imprimir dinero, una política que el gobierno favorable al mercado del Presidente Mauricio Macri — quien tomó posesión de su cargo en diciembre — quiere abandonar.
Gómez Minujín también piensa que las empresas argentinas emitirán cerca de US$ 4 mil millones este año. Los analistas han señalado que grandes compañías como Pampa Energia, Arcor y algunos bancos locales parecen estar interesados en la emisión de deuda.
Walter Stoeppelwerth, el director de investigación de Balanz Capital, un banco de inversiones en Buenos Aires, dice que recaudar capital en el extranjero era más barato para las compañías argentinas que en el mercado de bonos doméstico, donde tienen que pagar tasas de interés de más de 30%. "Hay mucho apetito para la deuda corporativa por parte de los compradores. Es difícil encontrar liquidez", él añadió.
Sin embargo, los funcionarios del gobierno han estado preocupados porque demasiadas compañías están adoptando una actitud cautelosa, a pesar de que hay muchos proyectos previstos para el futuro próximo, dijo Alejo Costa, economista principal de Puente, un banco de inversiones en Buenos Aires. "Ésta es una oportunidad histórica, pero parece que la mayoría de las empresas están dispuestas a esperar hasta que mejore la economía", él aseveró.
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