Probablemente el domingo nadie celebró como los suizos el día internacional del chocolate. Aquí proponemos un tour muy dulce por el país europeo.
Usualmente señalado como el país que elabora los mejores chocolates, en Suiza los hay de todos los colores y formas. Es uno de los ingredientes estrella de su gastronomía y más de la mitad de la producción nacional se consume dentro de sus fronteras. Es tanta la pasión por el chocolate que el país europeo ofrece desde visitas a fábricas hasta centros terapéuticos donde es posible sumergirse en una bañera de chocolate.
A continuación una lista de lugares donde disfrutar del mejor chocolate del mundo.
Un tren de chocolate
La fama del chocolate suizo se extiende al turismo y prueba de eso es que hay un tren de chocolateque realiza un viaje entre Montreux hasta la fábrica Cailler-Nestlé, en Broc. El viaje incluye una visita a la quesería de Gruyères y otra a la fábrica de uno de los chocolates más famosos de Suiza donde se pueden degustar y comprar sus especialidades.
Broc, tradición chocolatera
En Broc se realiza una de las elaboraciones más famosas y con más tradición de Suiza. En este pueblo se encuentra la fábrica de Cailler, fundada en 1825. Esta factoría acumula y muestra historia y anécdotas, y expone sus productos al visitante, que es invitado a demostraciones. Se encuentra 2 kilómetros al norte de Gruyères y para llegar solo hay que seguir los carteles de Nestlé.
Recorrido por la historia del chocolate
Imprescindible para los fanáticos del chocolate y de los viajes, está Lugano. Ubicada a orillas del lago Testino, es también el tercer centro financiero del país. Ahí se encuentra el Museo del Cioccolato Alprose que hace un recorrido por la historia del famoso producto suizo. Se muestra su elaboración que también se puede probar.
Un baño de chocolate
En pleno centro de Ginebra se encuentra After the Rain, un spa que ofrece baños de chocolate por 180 francos suizos (165 euros) por 30 minutos de dulce inmersión.
Dulce visita en Friburgo
En Friburgo se encuentra la sede de la fábrica de chocolate Villars, abierta en 1901. Es conocida por su elaboración con la cremosa leche alpina de Gruyère, las têtes au choco (cabezas de mousse cubiertas de chocolate). La fábrica está cerrada al público, pero se puede visitar a su cafetería-tienda para degustar su chocolate.
Un chocolate en el Sprüngli
Cerca de la estación central de Zúrich se encuentra el Café Sprüngli, abierto desde 1836. Además de pasteles, chocolate y café, el lugar ofrece almuerzos ligeros.
A las afueras de la ciudad está la famosísima fábrica de Lindt que se puede visitar y degustar chocolate de forma ilimitada.
Chocolate con estilo
En la ciudad de Interlaken, hay un café que imparte talleres miércoles y sábados para aprender a elaborar chocolate. Además, el lugar es famoso por su repostería y la terraza que da al parque.
Las trufas de St. Gallen
La Chocolaterie, en St. Gallen, es famosa por sus pralinés y sus irresistibles trufas, perfecta para conocer el proceso de fabricación del dulce suizo. La planta de arriba alberga un café y en la de abajo se encuentra el taller donde se puede ver, en directo, el trabajo del maestro chocolatero.
Dulce trilogía en Neuchatel
Según El País, en Neuchatel se encuentra la fabricación artesanal del mejor chocolate suizo, específicamente en la Rue du Seyon. Se trata de las confiterías Walder, Wodey Suchard y Schmid, las tres de gran renombre que hacen que el chocolate sea una de las mejores razones para visitar esta ciudad de elegante casco antiguo al noroeste del país.
Revise el artículo completo en El País.
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