El líder progresista también sumó esta semana una carta a la NM para hacer un acuerdo para elecciones municipales.
La última vez que el dos veces candidato presidencial Marco Enríquez-Ominami entró al Palacio de La Moneda fue en 2011 para una reunión con el presidente Sebastián Piñera a raíz de la demanda peruana en La Haya. Al llegar este nuevo gobierno de Bachelet, solicitó audiencias al ex vocero Álvaro Elizalde, al ex ministro del Interior Rodrigo Peñailillo y a la ministra del Trabajo Ximena Rincón. Pero nada. Nunca una confirmación. Ello, hasta ayer, cuando por medio de un correo con remitente de Interior se le confirmó a la vicepresidenta del PRO que la audiencia solicitada por el partido se llevará a cabo el próximo 1 de septiembre a las 9 am.
El motivo de la cita será entregarle una propuesta de plebiscito para definir como mecanismo para llevar adelante la reforma constitucional una AC. En la reunión también deberían participar los otros miembros del comité político: el vocero Marcelo Díaz y el ministro Segpres, Nicolás Eyzaguirre.
Enríquez-Ominami valora el giro de Burgos al aceptar recibirlo a diferencia de su antecesor y considera un buen paso la apertura que está teniendo para recibir todas las ideas: "Valoramos que el ministro Burgos abra las puertas de La Moneda, nos costó mucho poder ser recibidos, para expresar nuestros puntos de vista. No puedo dejar de valorar esto, que recién asumido Burgos responda con celeridad a nuestra intención de visitarlo", expresó a DF el ex candidato presidencial.
ME-O no esconde las diferencias que tiene con Burgos, sobre todo en tema constitucional. Sin embargo, le entrega palabras de elogio tanto a él como al senador Ignacio Walker por ser transparentes en sus pensamientos, por muy conservadores que estos sean: "Reconozco en él (Burgos) como en Ignacio Walker, que han hecho un esfuerzo por escribir sobre lo que piensan. Uno puede o no estar de acuerdo, pero hay huellas, antecedentes. Hay políticos que hacen declaraciones por modas, en eso Walker y Burgos han sido conservadores, pero siempre lo han sido y hay que reconocerlos", apuntó.
Esta reunión se dará en el marco del documento: "A empujar las reformas para un Chile con más igualdad y libertad, de lo local a lo nacional", que extendió el PRO a las fuerzas de centro-izquierda , con especial flanco en la Nueva Mayoría, con el fin de lograr un acuerdo para las elecciones municipales. El líder progresista explicó que sería necesario "concordar un programa" para luego entrar al tema de los cupos". De paso hace un llamado a la DC a juntarse a conversar, "nunca han querido tener una reunión de trabajo y conversación, la pregunta va para ellos", afirmó. ME-O también aclara que a la presidenta no la ve hace seis años y que existe ahí una distancia. No descartó, eso sí, sostener alguna nueva reunión con el gobierno.
El motivo de la cita será entregarle una propuesta de plebiscito para definir como mecanismo para llevar adelante la reforma constitucional una AC. En la reunión también deberían participar los otros miembros del comité político: el vocero Marcelo Díaz y el ministro Segpres, Nicolás Eyzaguirre.
Enríquez-Ominami valora el giro de Burgos al aceptar recibirlo a diferencia de su antecesor y considera un buen paso la apertura que está teniendo para recibir todas las ideas: "Valoramos que el ministro Burgos abra las puertas de La Moneda, nos costó mucho poder ser recibidos, para expresar nuestros puntos de vista. No puedo dejar de valorar esto, que recién asumido Burgos responda con celeridad a nuestra intención de visitarlo", expresó a DF el ex candidato presidencial.
ME-O no esconde las diferencias que tiene con Burgos, sobre todo en tema constitucional. Sin embargo, le entrega palabras de elogio tanto a él como al senador Ignacio Walker por ser transparentes en sus pensamientos, por muy conservadores que estos sean: "Reconozco en él (Burgos) como en Ignacio Walker, que han hecho un esfuerzo por escribir sobre lo que piensan. Uno puede o no estar de acuerdo, pero hay huellas, antecedentes. Hay políticos que hacen declaraciones por modas, en eso Walker y Burgos han sido conservadores, pero siempre lo han sido y hay que reconocerlos", apuntó.
Esta reunión se dará en el marco del documento: "A empujar las reformas para un Chile con más igualdad y libertad, de lo local a lo nacional", que extendió el PRO a las fuerzas de centro-izquierda , con especial flanco en la Nueva Mayoría, con el fin de lograr un acuerdo para las elecciones municipales. El líder progresista explicó que sería necesario "concordar un programa" para luego entrar al tema de los cupos". De paso hace un llamado a la DC a juntarse a conversar, "nunca han querido tener una reunión de trabajo y conversación, la pregunta va para ellos", afirmó. ME-O también aclara que a la presidenta no la ve hace seis años y que existe ahí una distancia. No descartó, eso sí, sostener alguna nueva reunión con el gobierno.
ALLAMAND "UNGE" A LÍDER DEL PRO COMO CANDIDATO Y SE NIEGA A PRIMARIA CON PIÑERA
"Liderazgos políticos, reinvención en un entorno de crisis". Esa fue la convocatoria al debate que se llevó a cabo ayer en la Escuela de Periodismo de la Universidad Adolfo Ibáñez y que tuvo como protagonistas al senador de Renovación Nacional, Andrés Allamand, y al ex candidato presidencial y líder del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami.
En un distendido encuentro, moderado por el director del Magíster en comunicación estratégica, Juan Cristóbal Portales y el decano de la Escuela de Gobierno, Ignacio Briones, el tópico que se tomó la discusión fue el tema de la semana: la carrera presidencial.
En ese marco, el senador de la oposición fue claro en ungir a su contendor, ME-O como el candidato natural de la Nueva Mayoría: "Estoy convencido que Marco Enríquez-Ominami va a ser el candidato, no sé si de toda la Nueva Mayoría, pero sí parte muy importante de ella. No veo ninguna razón para rechazar su candidatura cuando es el candidato con mayor proyección y fuerza y más respaldo en la izquierda", expresó ante la mirada sonriente del ex candidato.
Sin embargo, marcó una sola complicación, que el líder del PRO también la tiene muy claro como uno de sus principales obstáculos, la Democracia Cristiana: "La única duda que hay es que si la DC lo va a apoyar o si va a tomar una candidatura separada". Este resquemor se da, tanto por las diferencias programáticas que separan a la Falange del PRO, como también a que en la tienda liderada por el senador Jorge Pizarro aún no le perdonan el tibio respaldo que dio a la candidatura de Frei en las elecciones de 2009.
Así también, Allamand ante una de las consultas del público sobre su proyecto presidencial, aclaró que "yo no voy a competir con Sebastián Piñera nunca en primarias", aunque dejó abierta la puerta en caso de que el ex mandatario desistiera de competir.
"Liderazgos políticos, reinvención en un entorno de crisis". Esa fue la convocatoria al debate que se llevó a cabo ayer en la Escuela de Periodismo de la Universidad Adolfo Ibáñez y que tuvo como protagonistas al senador de Renovación Nacional, Andrés Allamand, y al ex candidato presidencial y líder del Partido Progresista, Marco Enríquez-Ominami.En un distendido encuentro, moderado por el director del Magíster en comunicación estratégica, Juan Cristóbal Portales y el decano de la Escuela de Gobierno, Ignacio Briones, el tópico que se tomó la discusión fue el tema de la semana: la carrera presidencial.
En ese marco, el senador de la oposición fue claro en ungir a su contendor, ME-O como el candidato natural de la Nueva Mayoría: "Estoy convencido que Marco Enríquez-Ominami va a ser el candidato, no sé si de toda la Nueva Mayoría, pero sí parte muy importante de ella. No veo ninguna razón para rechazar su candidatura cuando es el candidato con mayor proyección y fuerza y más respaldo en la izquierda", expresó ante la mirada sonriente del ex candidato.
Sin embargo, marcó una sola complicación, que el líder del PRO también la tiene muy claro como uno de sus principales obstáculos, la Democracia Cristiana: "La única duda que hay es que si la DC lo va a apoyar o si va a tomar una candidatura separada". Este resquemor se da, tanto por las diferencias programáticas que separan a la Falange del PRO, como también a que en la tienda liderada por el senador Jorge Pizarro aún no le perdonan el tibio respaldo que dio a la candidatura de Frei en las elecciones de 2009.
Así también, Allamand ante una de las consultas del público sobre su proyecto presidencial, aclaró que "yo no voy a competir con Sebastián Piñera nunca en primarias", aunque dejó abierta la puerta en caso de que el ex mandatario desistiera de competir.
www.df.cl
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