El empresario argentino, fundador de emprendimientos de éxito como Patagon y Wanaco Games, busca convertir su centro en Pirque en el más avanzado de su tipo en América Latina. También destaca el crecimiento "de la clase media" en el país y sus posibilidades.
Un lugar que permita "que un empresario importante, por ejemplo, se conecte con un emprendedor social, que nació en condiciones muy distintas, y que lo hagan en un ambiente que se preste para que desarrollen confianza". Tal es el objetivo que plantea el empresario argentino Wenceslao Casares, uno de los iconos de la innovación empresarial global, para el recinto que posee en Pirque y que busca convertir en un centro para promocionar el surgimiento de ideas.
El emprendedor trasandino explica, en una entrevistacon la revista "El Sábado" de "El Mercurio", que su objetivo con la sede que estableció en el castillo "Las Majadas" reside en "romper los elitismos" para dar salida a la creatividad.
"Estamos desarrollando algunos programas que son como becas, para que vaya gente a vivir ahí, con todo pagado, por seis meses", indica.
Allí confluirían emprendedores con artistas y líderes sociales, entre otros. Al mismo tiempo, revela que está en conversaciones con la Kennedy School of Government de Harvard (EE.UU.) para desarrollar otro programa dirigido a alcaldes jóvenes de América Latina.
Casares, quien desarrolla el centro junto a sus socios Pablo Bosch y Diego Valenzuela, sigue expandiendo los espacios en la edificación con el fin de habilitarlos para la realización de encuentros y conciertos al aire libre, todo centrado en facilitar la generación de redes entre quienes asistan, uno de los factores claves en el éxito de los emprendimientos.
El empresario reconoce que uno de los aspectos a superar para fomentar la innovación es "que hay mucha menos movilidad social que en otros lados".
"En Argentina, cuando vas a ver a un equipo directivo, verás mucha más mezcla de gente de la que ves en un equipo directivo en cualquier empresa en Chile", describe.
Al mismo tiempo, resalta el crecimiento de la "clase media emergente" en el país y sus posibilidades de desarrollo.
"Lo que veo en Puente Alto, que es la comuna más grande de Chile, es una parte del milagro chileno. En 10 o 15 años, gente que estaba viviendo en la pobreza emergió y se siente ahora de clase media", indica. "Para mí hay mucho potencial en ese proceso".
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