Compliance para los nuevos tiempos

Durante los últimos años, el contexto de los negocios en el mundo ha ganado un nivel de complejidad inmenso, no solo como consecuencia natural de las dinámicas de los mercados e industrias, sino que por la necesidad de balancear las estrategias y metas del negocio con el manejo de los riesgos de éste, y con el cumplimiento de las crecientes regulaciones impulsadas por los organismos encargados de supervisar los distintos mercados y/o industrias. La crisis subprime y los sucesivos escándalos que han impactado a distintos países y mercados han generado una corriente de mayor intervención por parte de las autoridades regulatorias. Las nuevas regulaciones para las sociedades anónimas, la banca, la industria aseguradora, los mercados de derivados, los temas tributarios, etc., constituyen un fuerte entramado de cumplimiento en el cual las compañías y sus directorios deben colocar mucha atención y foco.

Esto, sin embargo, no es una tarea fácil. Asegurar el total apego y alineamiento, en forma y fondo, a las normas, sin afectar el normal desarrollo de los negocios y el logro de los objetivos estratégicos de largo plazo, requiere de un potente liderazgo sobre el área de Compliance, o Cumplimiento. Las fuertes multas del regulador, el impacto demoledor sobre el riesgo reputacional de las empresas, y la incapacidad de mostrar un sólido gobierno corporativo de cara a la sociedad están forzando a las organizaciones a buscar con seriedad y atención a aquel profesional y/o ejecutivo que liderará el diseño y ejecución de la estrategia de Cumplimiento de la compañía.

¿Cuál debe ser el perfil ideal de este gerente de Cumplimiento? ¿Qué background académico debe poseer idealmente? Al discutir con gerentes generales y/o de Recursos Humanos sobre las competencias clave que deben poseer los ocupantes del cargo se mezclan características de tres posiciones que se consideran como fuente natural de reclutamiento: auditores, fiscales y gerentes de Riesgo. Las preferencias se concentran en los abogados, pues gerentes generales y directores generalmente consideran que estos profesionales tienen la mejor capacidad para "sumergirse" en las regulaciones, entenderlas, y poner las cortapisas para que todos en la compañía las vean claramente y las respeten a lo largo y ancho de la organización. Sin embargo, la ejecución e implementación de políticas y procedimientos de cumplimiento también requieren una eficiente y efectiva operacionalidad, la cual se encuentra generalmente en los ejecutivos de las áreas de riesgo y operaciones. El área de Cumplimiento requiere habilidades y know how también de estas dos áreas.

En términos de las competencias personales, claves para el éxito en la posición, no hay dudas de que los gerentes de Cumplimiento deben poseer un amplio set de habilidades de liderazgo: visión estratégica, influencia organizacional, excelente comunicación, tacto y juicio. Todas indispensables para "vender" su visión y trabajar efectivamente con el directorio, gerente general, y resto de las áreas de negocios y operativas de la empresa.

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