Mientras usuarios multiplicaban los reclamos por las pérdidas sufridas, actores del mercado de esta cuestionada moneda virtual salieron al paso de los cuestionamientos sobre el futuro de esta divisa.
La súbita bancarrota de la bolsa de intercambio de bitcoins Mt. Gox con sede en Japón, sigue generando repercusiones en el mercado de esta moneda virtual, cuya continuidad quedó en duda tras la desaparición del sitio.
La página web de la compañía aparecía en blanco este martes, luego de la dimisión anunciada el domingo pasado de su director ejecutivo, Marcos Karpeles, de la junta directiva de la Fundación Bitcoin, un grupo que busca promover la legitimidad de la cuestionada divisa.
La única actividad en la firma en Tokio era protagonizada por un grupo de personas que se concentraron fuera del recinto para reclamar que había perdido su dinero al invertir en la moneda virtual.
Karpeles no había dado este martes detalles de su paradero. El conserje de su departamento, situado en el exclusivo distrito de Shibuya en la capital nipona, dijo que el ejecutivo no estaba respondiendo el intercomunicador y que su buzón de correspondencia estaba tan lleno que la puerta batiente no cerraba.
Mt. Gox era conocida como la mayor operadora a nivel mundial de bitcoins. Sus directivos dicen ahora que el negocio está en un "punto de inflexión".
De acuerdo a la estructura del negocio, l os inversionistas depositan sus bitcoins en "billeteras digitales" que están en mercados específicos, así que el cierre de Mt. Gox equivale a un banco que cierra sus puertas y del que la gente no puede sacar su dinero.
El operador de mercado digital, que comenzó como un sitio para el intercambio de cartas hasta erigirse en el mayor gestor de bitcoins del mundo, era criticado por rivales en ese mercado e inversionistas que sostenían que había sido demasiado laxo en torno a su seguridad.
Un documento que circulaba en internet, que aparentemente era un plan de crisis de la firma, dijo que más de 744.000 bitcoins "se habían perdido por robo vinculado a la maleabilidad" y destacó que Mt. Gox tenía deudas por 174 millones de dólares y activos por 32,75 millones de dólares.
No fue posible verificar el documento ni la situación financiera de la operadora, pero si las cifras son correctas equivale al 6 por ciento de los 12,4 millones de bitcoin en circulación.
Repercusiones
Mientras crecía la desconfianza en los mercados debido a la debacle, i nversionistas de Tokio dijeron que el problema era con Mt. Gox y no con las bitcoins en sí.
Otros mercados de la divisa digital, asimismo, respondieron con enérgicas declaraciones buscando mantener la confianza tanto en la viabilidad de la moneda como en sus propios protocolos de seguridad.
La Fundación Bitcoin, el grupo comercial de la divisa digital, dijo en un comunicado que "Mt. Gox es uno de varios operadores y su salida, aunque desafortunada, abre una puerta de oportunidad. Este incidente demuestra la necesidad de que individuos y miembros responsables de la comunidad bitcoin lideren en proveer servicios confiables".
"Estoy muy enojado", dijo Kolin Burges, un operador de monedas que llegó desde Londres para exigir que Mt.Gox le informe qué sucedió con sus bitcoins, que representaban un valor de 300.000 dólares.
Seis importantes operadores de bitcoins -que permiten que los usuarios negocien bitcoins por dólares y otras monedas- se distanciaron de la operadora de Tokio.
"Esta violación dramática de la confianza de los usuarios de Mt. Gox fue el resultado de las acciones de una compañía y no refleja la resiliencia o valor del bitcoin y del sector de la moneda digital", dijeron las compañías Coinbase, Kraken, Bitstamp, BTC China, Blockchain y Circle en un comunicado.
"Como con cualquier industria nueva, hay ciertos malos actores que necesitan ser eliminados y eso es lo que hoy estamos viendo. Mt. Gox ha confirmado sus problemas en conversaciones privadas con otros miembros de la comunidad bitcoin", dijeron las compañías.
La moneda digital ha llamado la atención de reguladores por asuntos relacionados con la protección de los consumidores y el posible uso de bitcoins para lavar dinero de actividades ilegales.
La página web de la compañía aparecía en blanco este martes, luego de la dimisión anunciada el domingo pasado de su director ejecutivo, Marcos Karpeles, de la junta directiva de la Fundación Bitcoin, un grupo que busca promover la legitimidad de la cuestionada divisa.
La única actividad en la firma en Tokio era protagonizada por un grupo de personas que se concentraron fuera del recinto para reclamar que había perdido su dinero al invertir en la moneda virtual.
Karpeles no había dado este martes detalles de su paradero. El conserje de su departamento, situado en el exclusivo distrito de Shibuya en la capital nipona, dijo que el ejecutivo no estaba respondiendo el intercomunicador y que su buzón de correspondencia estaba tan lleno que la puerta batiente no cerraba.
Mt. Gox era conocida como la mayor operadora a nivel mundial de bitcoins. Sus directivos dicen ahora que el negocio está en un "punto de inflexión".
De acuerdo a la estructura del negocio, l os inversionistas depositan sus bitcoins en "billeteras digitales" que están en mercados específicos, así que el cierre de Mt. Gox equivale a un banco que cierra sus puertas y del que la gente no puede sacar su dinero.
El operador de mercado digital, que comenzó como un sitio para el intercambio de cartas hasta erigirse en el mayor gestor de bitcoins del mundo, era criticado por rivales en ese mercado e inversionistas que sostenían que había sido demasiado laxo en torno a su seguridad.
Un documento que circulaba en internet, que aparentemente era un plan de crisis de la firma, dijo que más de 744.000 bitcoins "se habían perdido por robo vinculado a la maleabilidad" y destacó que Mt. Gox tenía deudas por 174 millones de dólares y activos por 32,75 millones de dólares.
No fue posible verificar el documento ni la situación financiera de la operadora, pero si las cifras son correctas equivale al 6 por ciento de los 12,4 millones de bitcoin en circulación.
Repercusiones
Mientras crecía la desconfianza en los mercados debido a la debacle, i nversionistas de Tokio dijeron que el problema era con Mt. Gox y no con las bitcoins en sí.
Otros mercados de la divisa digital, asimismo, respondieron con enérgicas declaraciones buscando mantener la confianza tanto en la viabilidad de la moneda como en sus propios protocolos de seguridad.
La Fundación Bitcoin, el grupo comercial de la divisa digital, dijo en un comunicado que "Mt. Gox es uno de varios operadores y su salida, aunque desafortunada, abre una puerta de oportunidad. Este incidente demuestra la necesidad de que individuos y miembros responsables de la comunidad bitcoin lideren en proveer servicios confiables".
"Estoy muy enojado", dijo Kolin Burges, un operador de monedas que llegó desde Londres para exigir que Mt.Gox le informe qué sucedió con sus bitcoins, que representaban un valor de 300.000 dólares.
Seis importantes operadores de bitcoins -que permiten que los usuarios negocien bitcoins por dólares y otras monedas- se distanciaron de la operadora de Tokio.
"Esta violación dramática de la confianza de los usuarios de Mt. Gox fue el resultado de las acciones de una compañía y no refleja la resiliencia o valor del bitcoin y del sector de la moneda digital", dijeron las compañías Coinbase, Kraken, Bitstamp, BTC China, Blockchain y Circle en un comunicado.
"Como con cualquier industria nueva, hay ciertos malos actores que necesitan ser eliminados y eso es lo que hoy estamos viendo. Mt. Gox ha confirmado sus problemas en conversaciones privadas con otros miembros de la comunidad bitcoin", dijeron las compañías.
La moneda digital ha llamado la atención de reguladores por asuntos relacionados con la protección de los consumidores y el posible uso de bitcoins para lavar dinero de actividades ilegales.
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