Las autoridades españolas salieron ayer a desmarcarse de la crisis de deuda soberana de la eurozona, a un día de que Portugal se convirtiera en el tercer país de la región en pedir ayuda financiera a Europa, después de Grecia e Irlanda.
“Descarto absolutamente” que la crisis se contagie de Portugal a España, ya que “los mercados distinguen absolutamente entre los dos países”, dijo la ministra de Finanzas de España, Elena Salgado.
La prima que demandan los inversionistas por mantener deuda española en lugar de bunds alemanes ha caído más de 100 puntos base desde que llegaron a un récord de la zona euro en noviembre.
“No esperamos que ningún otro país de la Unión Monetaria Europea tenga necesidad de asistencia financiera”, escribió el estratega jefe de tasa de interés de Goldman Sachs en Londres, Francesco Garzarelli, en una nota a clientes.
Portugal ajusta detalles
En Portugal, en tanto, las autoridades ultimaron los detalles para solicitar el rescate de la Unión Europea, el que podría ascender a 75 mil millones de euros (US$ 107 mil millones).
El gobierno hizo su petición formal de ayuda a la Comisión Europea ayer, aprovechando el viaje del ministro de Finanzas, Fernando Teixeira dos Santos, a Budapest, a una cita con las autoridades de la eurozona.
El rendimiento de los bonos a diez años subió 6 puntos base ayer a 8,595%. El país enfrenta la maduración de bonos por 9 mil millones de euros en abril y junio. Aunque la bolsa repuntó 1,1%.
DiarioFinanciero.cl
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