Michelle Cazenave L.
Consolidarse en su origen. Esa es la apuesta que la Universidad Adolfo Ibáñez (UAI) se encuentra desarrollando en Viña del Mar, con un nuevo campus, que será inaugurado en marzo de 2011, explicó el rector de la casa de estudios, Andrés Benítez.
El proyecto implicó una inversión superior a los
US$ 50 millones y se encuentra ubicado en un paño de 20 hectáreas, que contará con casi 15 mil metros cuadrados construidos, en los terrenos colindantes al Sporting Club.
De acuerdo a Benítez, "hoy tenemos 1.500 alumnos en Viña del Mar y este campus nos permitirá recibir a unos 2.500 alumnos. Por esto, más bien estamos pensando en un crecimiento moderado".
Por esto, la UAI prepara la venta del terreno de su actual sede en Recreo -levantada en la casa de su fundador, el empresario Adolfo Ibáñez Boggiano-, proceso del que aún no hay detalles, pero que, según Benítez, "lo más probable es que la ocupe otra institución educacional".
De esta manera, el nuevo recinto permitirá contar con bibliotecas, gimnasios y laboratorios "de manera más adecuada", con más salas de clases y mayores espacios verdes, característica que distinguen a la universidad, junto con un estilo arquitectónico moderno y limpio.
Planes en Santiago
No obstante, la UAI también contempla un agresivo plan de expansión en la Región Metropolitana. De acuerdo a Benítez, dentro del terreno de 100 hectáreas que la universidad posee en Peñalolén en 2012 planea la apertura de una nueva sede, cuya construcción se llevará a cabo durante el próximo año y que ya se encuentra a la espera de la evaluación de impacto ambiental.
El edificio se destinará, principalmente, para oficinas de profesores y nuevos laboratorios para ingeniería, carrera en la que la universidad se quiere enfocar, por ser la que tiene el mayor número de alumnos dentro de la UAI.
Pero las futuras inversiones de la entidad contemplan proyectos aún mayores. Dentro del mediano plazo se pretende vender la sede que la universidad tiene en avenida Presidente Errázuriz, para cursos de educación ejecutiva, para trasladarla a su base principal. "Todo nuestro desarrollo futuro en Santiago está concentrado en Peñalolén", dijo Benítez.
En esta línea, en la UAI ya piensan dentro de los próximos cinco años en la edificación de un hotel que permitirá hacer cursos a ejecutivos, pero que, además, incluya una oferta de alojamiento, lo que implicaría en recurrir a una firma que lo opere y fomentará el crecimiento de su área de postgrado. Plan que también implicaría la construcción de una plataforma para que diferentes emprendedores puedan instalar sus negocios en el recinto, al mismo tiempo que cuentan con la asesoría de su incubadora Octantis y su Venture Lab.
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