2014/10/09

Mariano Rajoy rediseña los pilares de la política exterior española hacia América latina

Mariano Rajoy con Dilma Rousseff
Las claves
  • Mariano Rajoy: "Me atrevo a decir que es (la Alianza del Pacífico) el movimiento nuevo de integración más atractivo de cuantos se desarrollan hoy en el mundo".
  • La gran apuesta del gobierno de Rajoy con respecto a Mercosur es que Brasil acabe accediendo a firmar el acuerdo con la UE, junto con Uruguay y Paraguay, y Argentina cuando se sienta preparada.
(Especial para Infolatam por Rogelio Núñez)-. La Alianza del Pacífico y Mercosur, en especial Brasil, se han convertido en los dos ejes principales de la política exterior del gobierno de Mariano Rajoy hacia América latina. Unos ejes, con respecto al Atlántico y al Pacífico, diseñados e impulsados por el propio presidente del gobierno y el equipo que le rodea en el Palacio de la Moncloa.
Las últimas iniciativas en política exterior de Mariano Rajoy con respecto a Latinoamérica muestran que el presidente español ha tomado la decisión de asumir un mayor grado de protagonismo y llevar la voz cantante en el seno de la Unión Europea en lo que concierte a la política de Bruselas con respecto a América latina.
La doble apuesta: Alianza del Pacífico y Mercosur
Desde la llegada de Rajoy a la presidencial del gobierno, a finales de 2011, el ejecutivo español apostó por la Alianza del Pacífico como uno de los nuevos ejes de su política exterior hacia la región.
Significativamente, los dos primeros países latinoamericanos que visitó el presidente español fueron México y Colombia (abril de 2012) y desde ese mismo año España es miembro observador de la Alianza del Pacífico que integran Chile y Perú, además de los citados México y Colombia.
en el Parador Nacional de Cádiz. .EFE/Julio Muñoz/POOL
Mariano Rajoy convirtió a España en miembro observador de la Alianza del Pacífico en 2012
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, comentaba ya en 2013 que su Gobierno apoyaba a la Alianza y su proyecto de crear un área de libre comercio y circulación de personas: “España se ha dado cuenta -aseguraba Rajoy- de por dónde va el mundo”.
Y en este mes de octubre de 2014 era todavía mucho más claro: “España también ha sido el primer Estado miembro de la Unión Europea en apostar por la Alianza del Pacífico, donde se conjugan con acierto y con visión la apertura comercial, la seguridad jurídica y la vocación asiática. España se convirtió en el primer Estado observador de Europa en noviembre de 2012 y hoy hay más de 32 Estados observadores. Sin duda, la atracción que suscita la Alianza queda demostrada por la cantidad de Estados observadores que se han adherido a la misma. Me atrevo a decir que es el movimiento nuevo de integración más atractivo de cuantos se desarrollan hoy en el mundo”.
Además, ese vínculo con este nuevo foro de integración ha ido acompañado de iniciativas concretas. impulsadas por el gobierno de Rajoy, en favor de Perú y Colombia, países de los que España es triplemente socio (en la Alianza del Pacífico, por los acuerdos que mantiene la UE con ambas naciones e incluso dentro de la Comunidad Iberoamericana de Naciones).
En ese sentido, una iniciativa liderada por España en la UE y dentro del Comité de Representantes Permanentes ante la Unión Europea (Coreper) acabó en un gran éxito.
Tras una intensa gestión a todos los niveles ha prosperado que Colombia y Perú accedan al grupo de países a los que se dejará de exigir visado de corta estancia (noventa días) para entrar en el espacio Schengen de libre circulación.
El equipo de Moncloa y el propio Rajoy consideran este uno de sus mayores logros en política exterior pues fue un empeño personal del presidente y su equipo.
Mariano Rajoy: “Me atrevo a decir que es (la Alianza del Pacífico) el movimiento nuevo de integración más atractivo de cuantos se desarrollan hoy en el mundo”.
España defendió esta iniciativa  argumentando que no parecía lógico seguir exigiendo visa a Colombia y Perú, naciones con las que la UE tiene firmados desde 2012 sendos acuerdos comerciales.
En ese sentido el propio Rajoy asumió una posición muy clara pese a las resistencias que encontró en países como Alemania y en la propia Comisión Europea: “A principios del 2015 la visa Schengen será historia para nuestros queridos colombianos. España impulsó en el seno de la Unión Europea la supresión de los visados Schengen de corta duración para Colombia y Perú, que se hará efectiva en el segundo semestre de 2015. Es un acto de justicia, porque hay un reconocimiento del progreso que ha tenido Colombia”.
Brasil, 52 mil millones de razones
El otro eje de la política exterior de Mariano Rajoy hacia América latina pasa por el Atlántico y en concreto por Brasil. La idea no es dejar de valorar las demás relaciones con países latinoamericanos sino establecer ejes, en la línea de lo que otros gobiernos (el de José María Aznar y el de José Luis Rodríguez Zapatero) hacían con los Acuerdos de Asociación Estratégica, que ahors se han ido renovando con los países de la Alianza y con Brasil.
El gobierno de España apuesta no solo por el Pacífico, como una zona de dinamismo económico y comercial, sino también por el Atlántico tanto en su vertiente norte (gracias al Transatlantic Trade and Investment Partnership (TTIP) como en su vertiente sur, en este caso a través de un acuerdo con Mercosur.
El presidente español, Mariano Rajoy, recibe a Dilma Rousseff
El presidente español, Mariano Rajoy, recibe a Dilma Rousseff
En este sentido, destaca que Rajoy esté impulsando una acción novedosa con respecto a lo que ha sido la política tradicional de la UE, que apostaba por acuerdos bloque a bloque y no con países en concreto.
En su discurso en la pasada Asamblea del CEAL, Rajoy dejó entrever que el acuerdo con Mercosur no debe ser necesariamente con todos los países de este bloque, sino con aquellos que lo deseen, dejando la puerta abierta a los que ahora no quieran entrar.
Es el final de la política del café para todos y de dar derecho de veto a cada uno de los socios de un bloque: “España -sostiene Rajoy- también hará lo que esté en su mano para que concluyan con éxitolas negociaciones de un Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y MERCOSUR, o los Estados de MERCOSUR que así lo deseen. Es hora de recurrir a las fórmulas imaginativas que permitan concluir unas negociaciones que empezaron hace quince años”.
En este caso, Mariano Rajoy, quien en otras ocasiones ha dicho que era necesario encontrar nuevas fórmulas para que los países de Mercosur que sí desean firmar el acuerdo de libre comercio con la UE (Paraguay y Uruguay) lo puedan hacer, viene a reforzar tesis como la del actual presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, de encontrar esas soluciones “imaginativas”.
Y en realidad, Rajoy lo que buscaría es tratar de aplicar, al caso de Mercosur, lo ocurrido en el acuerdo entre la UE y la Comunidad Andina de Naciones. Ante el rechazo de Ecuador y Bolivia a firmar un acuerdo de libre comercio con la UE, Bruselas acabó, en 2012, firmando con Perú y Colombia un Acuerdo Comercial Multipartes que dejaba la puerta abierta a la entrada de otros socios.
Mariano Rajoy: “España también hará lo que esté en su mano para que concluyan con éxito las negociaciones de un Acuerdo de Asociación entre la Unión Europea y MERCOSUR, o los Estados de MERCOSUR que así lo deseen. Es hora de recurrir a las fórmulas imaginativas que permitan concluir unas negociaciones que empezaron hace quince años”.
Y dos años más tarde, el Ecuador de Rafael Correa acordó integrarse en el pacto de libre comercio que tienen los Veintiocho con Colombia y Perú, mediante el cual la mayoría de los productos agrícolas e industriales ecuatorianos entrarán en la UE con arancel cero. Y en el caso del banano también está incluido entre los productos beneficiados por la adhesión de Ecuador al Acuerdo Comercial Multipartes de Colombia y Perú a la UE ya que el banano pagarán 75 euros por tonelada en lugar de 176 ahora.
La gran apuesta del gobierno de Mariano Rajoy con respecto a Mercosur es que Brasil acabe accediendo a firmar el acuerdo con la UE, junto con Uruguay y Paraguay, y Argentina cuando se sienta preparada.
El gobierno español está convencido además de que un acuerdo entre la UE y Brasil sería un mensaje de confianza hacia el gigante sudamericano para que fuera escuchado por los mercados, justo cuando Brasil está atravesando por graves dificultades económicas (recesión técnica y alta inflación).
30 mayo de 2013. Madrid. Palacio de la Moncloa. EFE
Mariano Rajoy tiende puentes hacia los países de Mercosur más partidarios de firmar acuerdos con la UE.
Rajoy además es consciente de que España tiene mucho en juego en Brasil (inversiones por valor de 52 mil millones de euros, de entidades del peso de Telefónica o Banco Santander) por lo que si este país entrara en dificultades la onda expansiva alcanzaría a España vía Ibex 35 (ya ocurrió el pasado febrero con los problemas por los que atravesó Argentina).
El modelo seguido con los países andinos sería el esquema defendido por Rajoy para eludir el gran obstáculo que supone en estos momentos el rechazo de Argentina, y hasta ahora también de Brasil, para firmar ese acuerdo de libre comercio entre la UE y Mercosur.
En concreto, el gobierno español trata de construir un puente que sirva para ser recorrido por Brasil, donde los industriales de Sao Paulo y candidatos presidenciales como Aécio Neves abogan por alcanzar acuerdos de ese tipo.
Así un escenario futuro ideal sería el de firmar con Brasil, Uruguay y Paraguay, países más partidarios de alcanzar tales acuerdos, y dejar vía libre a la incorporación futura de Argentina, una vez acabe la hegemonía kirchnerista (los actuales precandidatos argentinos son favorables a establecer un TLC con Europa), y, sobre todo, de Brasil. El gobierno de Rajpoy no contempla firmar con Uruguay y Paraguay sin Brasil.
Así pues, los ejes de la actual política latinoamericana de Mariano Rajoy persiguen preservar y fortalecer los actuales intereses de España en la región (fundamentalmente, aunque no solo, en Brasil) a la vez que apostar por los escenarios que tienen mayor proyección de futuro (el área del Pacífico y la alianza que conforman México, Colombia, Perú y Chile).

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