Los Cueto, más allá de LAN, siguen atrayendo inversiones

Iniciativas inmobiliarias, cementerios y participación en la minera Michilla son parte de estas fichas:

Juan José Cueto, el segundo de los hermanos, es quien lidera el manejo del patrimonio de este grupo de origen hispano compuesto por Enrique, Ignacio y Esperanza, junto al patriarca Juan Cueto Sierra. Una de las iniciativas, Valle Escondido, es el polo que atrajo a una nueva compañía hispana inmobiliaria, que inicia negocios en Chile.

A.G.

Juan José Cueto, el segundo de los hermanos, es quien lidera el manejo del patrimonio de este grupo de origen hispano compuesto por Enrique, Ignacio y Esperanza, junto al patriarca Juan Cueto Sierra. Una de las iniciativas, Valle Escondido, es el polo que atrajo a una nueva compañía hispana inmobiliaria, que inicia negocios en Chile. La próxima encuesta CEP -que por estos días está en trabajo de campo- es uno de los sondeos que no será indiferente para la familia Cueto, de cara a la opción presidencial de Sebastián Piñera.

Es que la opción de su amigo y socio en LAN impondrá a este grupo empresarial un cambio no menor en la propiedad de la aerolínea que controlan, LAN Airlines, donde comparten con Piñera a través de un pacto de accionistas. "Es un negocio de una magnitud en que no van a perder el control. Eso es claro. Pero ésta no es una sociedad a la antigua, en que ellos quieran dominar por dominar. Puede llegar un muy buen socio. Lo primero que hay que ver son las espaldas y el corazón del que llegue", dice un estrecho colaborador, quien por lo mismo plantea que no hay que apresurarse a sacar cuentas de cuánto sería el patrimonio que los Cueto estarían disponibles a desembolsar en esta operación como compradores. Más que LAN LAN es sin duda el principal activo de la familia Cueto, valorada en bolsa en unos US$ 3.700 millones.

La familia se inició en el rubro aéreo hace unas tres décadas a través de Fast Air. Hoy LAN se ubica como uno de los mayores conglomerados aéreos de Sudamérica. Pero por cierto no es el único negocio de la familia que integran el patriarca Juan Cueto Sierra y sus hijos Enrique (50), Juan José (48), Ignacio (45) y Esperanza, la única mujer. Si Enrique ha sido la cara visible de LAN y su estratega para el largo plazo, e Ignacio el gestor en el día a día en la aerolínea, Juan José Cueto es quien se enfocó en manejar los otros desarrollos, tras un paso por Fast Air en sus inicios, montando las operaciones en Estados Unidos. Definido por sus cercanos como introvertido, muy hábil en el ámbito financiero, muy de números, estudioso y analítico, Juan José Cueto es ingeniero comercial de la Universidad Católica (carrera a la que ingresó en 1978).

Desde la vicepresidencia ejecutiva de la sociedad Costa Verde, él es quien supervigila un patrimonio donde toda la familia participa, y que tiene intereses en el rubro inmobiliario -Valle Escondido- y cementerios. A través de Parques de Chile la sociedad aglutina un conjunto de 17 cementerios a lo largo del país -repartidos de Calama a Angol, incluido Parque Cementerio Canaán en Santiago- y que les otorgan ya en torno a un cuarto de la torta nacional en este rubro. Cercanos dicen que no están previstas nuevas inversiones relevantes a través de Costa Verde. De hecho en 2005 desinvirtieron en Forestal Copihue.

Eso no obsta que los proyectos sigan creciendo por la vía de terceros desarrolladores. Es el caso de Valle Escondido, el exclusivo paño de 190 hectáreas en Lo Barnechea -donde comparten propiedad con Bancard y la familia Martínez-, que atrajo a una nueva compañía hispana inmobiliaria, quien inicia negocios en Chile: Coinasa (Consorcio de Inversiones y Administración), compañía representada por el español avecindado en Chile, Alberto Ardid, y que en la península ibérica es una de las importantes desarrolladoras de proyectos de alto valor (incluido también las Islas Canarias).

Coinasa sólo había aterrizado en México y en pequeña escala en Venezuela y ahora en tres meses más debutará con un edificio en Valle Escondido, Coinasa Golf. "Me pareció interesante", dice Ardid, sobre un proyecto cuya inversión suma 300 mil UF, en 24 departamentos cuyos precios fluctuarán entre 12 mil a 15 mil UF. Además, los Cueto tienen participaciones minoritarias en Inmobiliaria Nueva Las Condes (20%, en sociedad con la familia Sarquis y otros inversionistas), y la minera Michilla (15%), junto al grupo Luksic. "Había una amistad personal entre don Juan Cueto y don Andrónico (Luksic)", explica un miembro de Antofagasta Minerals, sobre este activo al que llegaron los Cueto a través del antiguo Banco Concepción. En Costa Verde -similar a lo que ocurre en LAN-, la familia Cueto se ha rodeado de un grupo de ejecutivos de confianza, conocidos en su mayoría de la época universitaria. Es el caso de Matías Herrera, ingeniero comercial y ex compañero de Juan José Cueto, quien ostenta la gerencia de inversiones en el family office.

En el pasado, Herrera trabajó en la sucursal de Miami del Banco de Chile. Junto a ellos están Juan Carlos Navajas (vicepresidente de proyectos de cementerios y también ex compañero de Juan José); Luis Ortega, contralor, y Carlos Vallette, gerente de finanzas.

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