"Lo que es indudablemente cierto es que no teníamos las herramientas que ustedes querrían en nuestra caja de herramientas", afirmó el director ejecutivo de la compañía, Tony Hayward. Además, aceptó que era una crítica totalmente justa decir que la compañía no estaba completamente preparada para un derrame petrolero en aguas profundas.
Hayward se disculpó ayer por haber dicho que quería su "vida de vuelta". "Pido perdón, especialmente a las familias de los once hombres que perdieron sus vidas en este trágico accidente. Esas palabras no representan lo que siento respecto a esta tragedia", agregó.
La compañía también enfrenta un problema de relaciones públicas. Luego de más de seis semanas de derrame sin control, la última controversia se produjo tras la decisión anunciada el martes de nombrar a Ann Wornack-Kolton, ex encargada de prensa de Dick Cheney durante su época como vicepresidente, a cargo de las relaciones públicas de la compañía en EE.UU.
El principal think tank demócrata de Washington, Center for American Progress, calificó el desastre de BP como el Huracán Katrina de Cheney en un informe que argumentó que el desastre era la culminación del estrechamiento de los lazos entre reguladores e industria que se remontan al controvertido grupo de trabajo creado por Cheney en 2001. El documento afirma que hay una conexión entre Cheney y el rol "inadecuado" del Minerals Management Service, el regulador de la industria en Washington.
DiarioFinanciero.cl
No hay comentarios.:
Publicar un comentario