|
|
El instituto emisor ajustó la inflación a diciembre a 2,8% y destacó el impacto que ha tenido en esa variable la medición del Transantiago.
Pese a las sorpresivas cifras de crecimiento de la economía de los últimos meses, el Banco Central mantuvo ayer su proyección para 2007 en un rango de entre 5% y 6%, reservando los ajustes más importantes para sus estimaciones de inflación y comercio exterior.
En el Informe de Política Monetaria (IPOM) de mayo presentado por el presidente del instituto emisor, Vittorio Corbo, ante la Comisión de Hacienda del Senado, se estima que el desempeño de la actividad se situará dentro del mismo rango estimado en enero, aunque destacan que el balance de riesgo para el ejercicio está ahora “sesgado al alza”. Entre estos elementos se enfatiza el mayor impulso fiscal y que es posible que “las buenas condiciones financieras y el bajo desempleo lleven al consumo a crecer más que lo proyectado”. De hecho, ese sector ha sido uno de los motores del dinamismo durante el primer trimestre, junto con la minería.
Así durante este año la actividad estará sobre el PIB potencial, que se estima en 5% para el período 2007-2009, el cual debió ser recalculado por la autoridad monetaria ocupando las nuevas cuentas nacionales con base en 2003.
Inflación Con este escenario, la brecha de capacidad de la economía se estaría cerrando más rápido que lo observado en enero pasado, aunque persiste la incertidumbre respecto del verdadero tamaño de ésta. Por esto, el instituto emisor no descarta que esta brecha sea menor a lo estimado o que se cierre más rápido debido a un dinamismo superior en la actividad, lo que impactaría a la inflación.
De hecho, la autoridad monetaria revisó al alza sus proyecciones de IPC, pasando de una estimación de 2,3% a 2,8% a diciembre y una inflación promedio para 2007 de 2,4%, 0,4 punto porcentual más que en el informe anterior.
Corbo indicó que en lo que va del año se destaca el impacto que tuvo la nueva forma de medir los precios del transporte público debido a la puesta en marcha del plan Transantiago, el que tuvo una incidencia negativa de 0,5 punto porcentual en el primer trimestre, lo que no se preveía en enero. Pero, esta baja se neutralizó con el alza en los precios de las gasolinas, los que incidieron en la misma proporción en la inflación de los tres primeros meses. A lo que se suman alzas mayores a las proyectadas en algunos alimentos.
Asimismo, el Central puntualizó que hay incertidumbre sobre los futuros efectos del plan de transporte en el nivel de precio, ya que “no existe certeza acerca de cuál será la magnitud del cobro adicional que se hará por el trasbordo entre buses a partir de agosto y qué porción de viajes afectará”. Sin embargo, para su escenario base, el organismo estima un alza de $ 20 a partir de agosto producto de los trasbordos y a partir de 2008 una tarifa que se reajustaría de acuerdo con el polinomio tarifario que regía a las micros amarillas.
Así, el IPC llegaría a valores cercanos a 2% durante el segundo y el tercer trimestre, para con posterioridad volver a valores más cerca de 3%, donde se situará durante 2008.
Regla fiscal Las proyecciones realizadas para 2008 por el instituto emisor toman como supuesto que la política fiscal seguirá enmarcada en la regla del superávit estructural, con un valor de largo plazo del cobre usado en la Ley de Presupuestos similar al que se calculó el año pasado (de US$ 1,21 la libra).
Estos supuestos podrían sufrir modificaciones el 21 de mayo, ya que ha trascendido que la presidenta de la República, Michelle Bachelet, anunciaría algún tipo de modificación a la regla de superávit estructural, para aumentar el gasto fiscal como lo han pedido algunos parlamentarios de su propia coalición. En este sentido, una de las medidas que podría informar la mandataria es ir reduciendo paulatinamente el superávit estructural desde el 1% del PIB hasta llegar a 0%, lo que significarían ingresos disponibles para el Fisco cercanos a US$ 1.600 millones.
El Central alertó que si este año se fija un precio de referencia del cobre significativamente mayor “conduciría a una modificación importante del escenario base, pudiendo impactar los niveles proyectados de la inflación y el tipo de cambio real (TCR), así como la trayectoria posible de la tasa de política monetaria (TPM)”.
Sobre el tipo rector, la autoridad monetaria manifestó que, como supuesto metodológico, su escenario base contempla que en los próximos meses la tasa “seguirá una trayectoria similar a la que se deduce de los precios de los activos financieros en las dos semanas previas al cierre del informe”, lo que deja abierta la puerta a ajustes al alza, aunque subraya que la evolución de la TPM dependerá del escenario macroeconómico y de las proyecciones de inflación.
www.eldiario.cl |
No hay comentarios.:
Publicar un comentario